Hace un buen tiempo, allá en mis estudios iniciales, leí que Platón deseaba que a los pueblos los gobernaran los más sabios, los más preparados; de esos dichos han pasado siglos y, por lo que veo y escucho, creo que no avanzamos. Vamos hacia atrás: al menos la violencia y las acusaciones de Manlio Fabio Beltrones, deja mucho que desear de como hoy en día se practica la política.
Hace días se aparecieron en Teocaltiche un grupo de jóvenes priistas capitaneados por Laura García. Ante la algarabía Salí a ver que anunciaban o hacían: se pusieron a plantar árboles de sombra en la plaza, a un costado de la cancha de basquetbol. Ya me imagino la sombra que, dentro de unos años, van a proporcionar a niños y adultos. “Hagamos ECO” se autonombran. Proyectan, promueven, los valores del desarrollo sustentable, apoyan a la ecología.
¿Quién es el líder?, pregunte y me señalaron a Rully Yáñez y el me presento a Laura García, una joven, casi recién egresada de la Universidad; no cuenta con mucha experiencia laboral y su única experiencia política fue en el Cebetis, pues fue la Presidenta de la Sociedad de Alumnos. Le gusta, pues, la política y trae buenas y nuevas ideas. Quizá por eso el PRI la incluyo en la planilla de Oscar Almaraz Smer como regidora.
Que el PRI incorpore a sus filas a jóvenes, hombres o mujeres, como Rully Yáñez y Laura García, es altamente positivo. Es la sangre joven, comprometidos con el presente, y por eso toman banderas ecologistas… Saben muy bien que el planeta, para su supervivencia, requiere de nuevas generaciones comprometidas con el cuidado y la protección del medio ambiente.
Estoy convencido que Laura y Rully no son los únicos jóvenes preocupados por el futuro de la naturaleza. Hay otros jóvenes, en uno y otro partido político; que con su comportamiento socializan un compromiso. Saber de su existencia lanza el mensaje de que la juventud está preocupada por el mundo en que vive. Actitudes positivas, que enaltecen la praxis de la política, a diferencia de aquellos que la destrozan con sus actitudes, con sus prácticas lesivas.
Creo que buena parte de los ciudadanos se sintió mal cuando se enteró que grupos de jóvenes del Movimiento Ciudadano y del Partido Acción Nacional protagonizaron una reyerta con saldo de heridos y lastimados. No hay forma de justificar esta acción, ni señalando que fue al calor de las arengas de unos y otros a sus candidatos. La violencia en la política es síntoma de la apolítica: la política debe ser dialogo, debate, argumentación, negociación, acuerdo. Nunca golpes ni violencia.
“Hagamos ECO” es una clara invitación no solo para los jóvenes, para toda la población, hombres y mujeres, niños y adultos; eco para solidarizarnos, por ejemplo, con los grupos vulnerables; para solidarizarnos con el dolor ajeno y apoyar causas sociales… pero sobre todo, hacer ECO del compromiso social que todos, como individuos, tenemos con nuestro entorno, sea ecológico, político, educativo, social o cultural.
Lo que uno lamenta, a veces, es que jóvenes como Laura y Rully al subir al poder, al trepar sus primeros peldaños se olvidan de su deber ser: aprenden fácilmente las mañas y triquiñuelas de los dinosaurios del poder: se mimetizan con el poder, se hacen parte de sus prácticas y se olvidan de la realidad social. El poder, diríamos, los corrompe, los hace suyos, les roba su inquietud, los convierte en burócratas de la política. Tan simple: ¿Dónde están quienes han sido lideres juveniles del PRI?
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