Tampico, Tamaulipas. - La aprobación de leyes que favorecen la práctica del aborto en México, en general, pero en algunos Estados, en particular, obedece a un plan orquestado a nivel internacional, pues esto mismo se observa en varias naciones del mundo, es así que la Iglesia Católica habrá de trabajar con acciones que despierte los principios y los valores de cada persona, declaró el obispo de la Diócesis de Tampico, José Armando Álvarez Cano.

Agregó que con este despertar de las familias porteñas se logrará, en especial, que se reviertan muchas leyes que han sido aprobadas en el país y que próximamente en Tamaulipas se podría ver el mismo escenario, pues el Congreso del Estado busca la homologación de avalar la práctica del aborto en cualquier situación, sin tomar en cuenta que se trata de una vida.

"Sí, normalmente se realiza a nivel ahí en la Iglesia, se tienen los rezos (de la jornada) '40 Días por la Vida', que es un rezo por toda esta situación que vivimos, yo creo que (es algo) que ya estamos viendo, es todo un programa, toda una serie de situaciones de nivel no solamente a nivel mexicano sino a nivel global, hay toda una agenda en este sentido, de ir trabajando, ya tendremos que trabajar con nuestros principios y con nuestros valores personales, verdad, porque la ley a veces no nos ampara", precisó. 

Y añadió;

"Yo creo que seguir trabajando en la conciencia de las personas, yo creo que es el trabajo en familia, que se le inculque a uno el respeto por la vida, el valor de ella, de la dignidad, yo creo que ahí nos toca trabajar especialmente, aunque las leyes vayan por un camino, nuestra conciencia y nuestro pensamiento tienen que ir con otro".

Monseñor Álvarez Cano estuvo tres semanas en África, donde acompañó a cientos de misioneros mexicanos que también asistieron a Kenya y Tanzania por la misma causa, como parte del apostolado de difusión de la fe cristiana.

"Fue una experiencia muy extraordinaria, vengo de Kenya y Tanzania, estuve por ahí tres semanas, especialmente acompañando a los misioneros de México que están por allá en aquellos rumbos, creo que ha sido una experiencia realmente buena, pues hoy como obispo soy el encargado de las misiones, y me toca acompañar, animar, estar ahí con los misioneros en ese campo, así que para mí es una experiencia realmente extraordinaria", precisó.