Ciudad Madero, Tamaulipas. - La señora Amelia de la Rosa y su familia, pasan por el momento más amargo de su vida, el personal médico del Hospital Civil de Madero le notificó de la muerte de su hija Leivi de 19 años y quien apenas el domingo se convirtió en madre de una princesita; resultados arrojaron que era positiva a Coronavirus y su cuerpo fue incinerado.

Sin poder contener las lágrimas y con la voz entre cortada, reconoció que "mi hija murió y ya no supe más de ella porque no me dejaron verla, la incineraron".

Relató que durante el fin de semana la joven dio a luz en el Hospital Civil de Madero, sin embargo, falleció por complicaciones durante este jueves; las pruebas de salud donde viene el titular de la Jurisdicción Sanitaria, Héctor Pérez Monsiváis, arrojan un resultado positivo en el virus de Covid-19.

Relató que tenía la ilusión de que tanto su hija y su nieta salieran bien del nosocomio, que cabe señalar no es para atender pacientes con Coronavirus, sin embargo, durante el parto su hija tuvo una complicación médica derivado a una hemorrágica, por lo que los doctores le tuvieron que retirar la matriz.

Pese a ello, aseguró que el estado de salud de la joven originaria de Altamira, era reportado como estable al grado de que incluso ya recibía alimentos.

Sin embargo, presentó fiebre por lo que el día 22 de junio se le tomaron las muestras para detectar si podría ser portadora de Coronavirus

Los resultados que fueron emitidos el día 24 arrojaron que la chica era positiva a la enfermedad, por lo que al fallecer su cuerpo fue incinerado sin que a la familia le dieran mayor explicación.

"Ahora en la mañana nos avisaron que mi hija había muerto, nos hablaron durante la madrugada. Yo les dije que ya la había perdido para siempre, aquí nos dijeron que había muerto del virus", añadió sin dejar de sollozar.

Los familiares de la víctima portan las fotografías de la chica, a quien desde que ingresó a labor de parto y que nunca volverán a ver, pues su cuerpo fue reducido a cenizas y entregado en una urna.

"Nos decían que estaba bien y que estaba bien, pero era pura mentira. Nos dijeron que nos presentaremos a las siete de la mañana y cuando llegamos para proceder a velarla nos dijeron que ya habían hecho todo para que viniera la funeraria, no nos tomaron en cuenta, llegaron y se llevaron el cuerpo sin avisarnos nada", añadió.

Ahora, están a la espera de que les entreguen a la recién nacida, que incluso se le aplicó la prueba para Covid-19 misma que salió negativa.

La familia de Leivi planea interponer una denuncia ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos, al considerar que la jovencita sufrió de una negligencia médica, al manifestar que fue en el hospital donde pudo contraer el coronavirus.