Ciudad de México.-En cumplimiento con el Programa Nacional de Reconstrucción (PNR), instrumentado por la Secretaría de Cultura del Gobierno de México, para la atención de los bienes históricos dañados por los sismos de septiembre de 2017, se entregó el día de hoy, sábado 18 de enero de 2025, en Santo Domingo Tehuantepec, Oaxaca, la restauración del Exconvento de Santo Domingo, monumento que recuperará su funcionamiento como Casa de Cultura.

La secretaria de Cultura del Gobierno de México, Claudia Curiel de Icaza, en compañía del gobernador de Oaxaca, Salomón Jara Cruz, y del director general del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Diego Prieto Hernández, encabezó la reapertura del inmueble, cuyos antecedentes constructivos datan del siglo XVI.

Curiel de Icaza, en el segundo día de su gira por Oaxaca, subrayó la importancia de dar vida a los espacios recuperados por lo que, aseguró, habrá un trabajo coordinado para reactivar los inmuebles atendidos en el PNR.

En el caso del Exconvento de Santo Domingo en Tehuantepec, “se trabajará en una estrategia conjunta con el INAH para convertirlos en semilleros artísticos, con el propósito de que las y los istmeños puedan apropiarse de estos lugares ancestrales”.

Detalló que la dependencia a su cargo facilitará las medidas para que las personas interesadas accedan a convocatorias de nivel federal encaminadas al desarrollo de actividades y proyectos artísticos y culturales.

Salomón Jara Cruz, gobernador de Oaxaca, expresó que el exconvento dominico es un baluarte de la cultura zapoteca y ahora, con su atención, se volverá un epicentro de la creatividad y el arte. “Tehuantepec, cuna de la inmortal Sanduga zapoteca, recupera una parte fundamental de su herencia el día de hoy, y nos invita a conservar nuestra cultura entre todas y todos los que damos vida a Oaxaca”, declaró.

“Hoy celebramos que Oaxaca es el corazón cultural de México, donde este emblemático lugar, está profundamente ligado a nuestra historia y mestizaje, vuelve a ser un epicentro de arte, creatividad y cohesión social. Esta obra simboliza el trabajo en equipo de los tres órdenes de gobierno y la comunidad”, afirmó.

Anunció la construcción de la Escuela de Restauración en Casa Odrisola, en San Pedro y San Pablo Teposcolula, con inversión del Gobierno de México, a través de la Secretaría de Cultura, como parte del programa de educación artística, cultural y patrimonio. La apertura de la institución educativa está considerada para abril del presente año.

Al tomar la palabra, Diego Prieto Hernández, manifestó estar complacido por acompañar un acto que “significa la culminación de un trabajo de largo aliento y enorme compromiso como fue la restauración del antiguo convento”, el cual se suma al Arzobispado y la Iglesia-Catedral de la localidad, previamente entregadas.

La visita a la obra del patrimonio arquitectónico contó con la presencia de funcionarios de la Secretaría de Cultura como la subsecretaria de Desarrollo Cultural y el director de Sitios y Monumentos del Patrimonio Cultural, Marina Núñez Bespalova y Arturo Balandrano Campos, respectivamente.

Acudieron igualmente el titular del Centro INAH Oaxaca, Omar Vázquez Herrera; la edil de Santo Domingo Tehuantepec, Ana Pérez Velázquez; la presidenta honoraria del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia de la entidad, Irma Bolaños Quijano, y el senador Antonio Morales Toledo.

El conjunto conventual de Santo Domingo Tehuantepec representa una historia de cinco siglos, a la vez que condensa el carácter multicultural y multilingüístico del pueblo istmeño.

Especialistas partícipes en la restauración del templo señalaron que los alcances de la misma incluyeron la consolidación de arcos, muros y bóvedas de mampostería de tabique en la nave principal y en el campanario, así como la integración de pisos de barro, enladrillados en la cubierta, aplanados y pintura a la cal, instalaciones eléctricas y de iluminación, carpintería y herrería.

Construido entre 1544 y 1555 a instancias de la Orden de los Predicadores (Dominicos), cuyo benefactor fue el último rey zapoteca, Cosijopi, el inmueble perteneció a la Diócesis de Antequera desde 1597. Tras las Leyes de Reforma, de mediados del siglo XIX, el recinto conventual se transformó en cuartel y posteriormente en cárcel.

Tras la construcción de una nueva penitenciaría, el sitio se desocupó en 1984, año en que fue rehabilitado para albergar a la Casa de Cultura de Tehuantepec, uso que fue interrumpido por los terremotos de 2017 pero que, ahora, se recupera con todo su esplendor.

El rescate de la edificación no solo contribuye a salvaguardar el patrimonio edificado nacional, sino que promueve la preservación y difusión de tradiciones y costumbres que dan identidad a las y los oaxaqueños. Mediante la implementación del PNR, el Gobierno de México continúa con los esfuerzos finales de la atención a los 3,269 bienes patrimoniales afectados por los citados desastres naturales.