Tampico, Tamaulipas. - La pesca en la Laguna de Champayán y el río Tamesí atraviesa una grave crisis debido a la falta de producto y los altos costos para operar, señaló el vendedor de pescados y mariscos en La Puntilla, Antonio Gutiérrez.

Destacó que las condiciones actuales han dejado sin actividad a muchos pescadores, ya que las especies disponibles son pequeñas y no justifican el esfuerzo de captura.

En conferencia, Gutiérrez explicó que quienes cuentan con permisos de pesca enfrentan altos costos. “Mi papá paga entre 40 y 50 mil pesos por cuatro o cinco permisos, y además se cubren cuotas anuales adicionales por cada uno”, señaló. Esta situación contrasta con la realidad de los pescadores libres, que operan sin documentos ni regulaciones, generando competencia desleal en el sector.

La falta de subsidios gubernamentales que desaparecieron hace más de seis años, ha agravado la problemática. “No hay apoyos para los pescadores o los permisionarios; esto ha hecho que la pesca se deteriore aún más”, afirmó Gutiérrez, quien también llamó la atención sobre la necesidad de fortalecer los comités oficiales de pesca para evitar que la situación empeore.

La escasez de pescado no solo afecta a los pescadores, sino también a los vendedores locales, quienes dependen de un flujo constante de producto. “En la Laguna de Champayán y el río Tamesí no hay nada, nadie va a pescar porque simplemente no vale la pena”, lamentó Gutiérrez.

Finalmente, el vendedor urgió a las autoridades a intervenir con soluciones concretas. “La pesca libre nos está afectando, y sin subsidios ni regulaciones el sector sigue en decadencia. Necesitamos apoyo y medidas para garantizar la sostenibilidad de la pesca en la región”, concluyó.

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