Tampico, Tamaulipas. - Las inundaciones que dejaron los ciclones Hilda e Inés acabaron con la Isleta Pérez, la primera zona industrial del municipio de Tampico entre los años de 1930 y 1955, pero en la búsqueda de una mejor zona para las empresas instaladas, colocándose después de 1970 en la zona sur de Altamira, ha dejado en el olvido el sector que se ubica a un costado del río Pánuco. 

Fue durante los años de 1920 que la zona de la Isleta Pérez, por su ubicación a un costado del río y también por su cercanía al límite al Estado de Veracruz, comenzaron a instalarse empresas como la primera embotelladora de Coca-Cola en México, también PPQ lo que después se convirtió en Dupont y que posteriormente fue instalada en el sector Miramar de Altamira. 

Los primeros Astilleros y Varaderos Appedole también se encontraban en la Isleta, la fábrica de pinturas Solex, las refresqueras Orange Crush y Titán, la compañía Liquid Carbonic. 

Se llama así, la Isleta Pérez por el nombre de quien fuera el dueño original de este gran predio Alfonso Pérez. Debido a un acuerdo con el Gobierno del Estado, para dividir el terreno que era la Isleta para habilitar muelles, astilleros, fábricas, bodegas y otras áreas.

En el año de 1918, la Federación tomó la decisión de instalar los mercados en la parte franja de la Isleta, la Plaza Hijas de Tampico, siendo primero conocida como la colonia Relleno del Tamesí. También se aprovechó para construir la Aduana Marítima en donde se habilitó la estación del ferrocarril. 

En la Isleta Pérez además de encontrar calles abandonadas, los edificios abandonados, algunos de ellos tan solo con paredes sin techos, otros solo con estructuras metálicas, que esconden la historia de las primeras empresas de Tampico; también se tiene una imagen tallada en cedro de Líbano con 200 años de antigüedad, misma que atesoran los habitantes que todavía integran esta zona.  

La Virgen del Carmen es patrona de los pescadores y en cada mes de julio se festeja con la participación de los tres municipios de Tampico, Ciudad Madero y Altamira. Ahí, en el callejón del desaparecido parque Alijadores se tiene una humilde capilla para ella.

La Isleta Pérez fue parte de la conquista de México, llegaron en el año de 1520 el capitán Diego de Camargo, quien llegó por el Pánuco, pero los habitantes de la zona se enfrentaron para defender su territorio huyendo a la Villa Rica de la Veracruz.  

El deporte marcó también la historia de la Isleta, con un campo de béisbol que en medio estaban las vías del tren, cuando pasaba la locomotora interrumpía el partido. Se pueden recordar a los beisbolistas Angel Castro y Héctor ‘El Superman’ Espino.