Tampico, Tamaulipas. - Después que se recibió una queja ciudadana en el sentido que la regidora porteña Carmen Díaz Barrios estaba dando consultas y otorgando fármacos, la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Coepris) abrió un expediente a la edil, esperándose su cierre dentro de la siguiente semana, indicó el coordinador de la oficina de la dependencia, Nicolás Berumen Ávalos.

Dijo que dar consultas en la Sala de Regidores no es lo apropiado, y además en el medicamento asegurado había medicinas que ya estaban caducas, es por ello que hasta la próxima semana podría emitirse un resolutivo de la inspección realizada.

Aseguró que la problemática subsiste a partir de que la regidora hace consultas médicas en un sitio que no es el apropiado, por tanto, en el escrito que se elaboró se le prohíbe que las realice en tanto el medicamento quedó asegurado preventivamente dentro de la misma Sala de Regidores.

Explicó que será hasta la siguiente semana que se pueda dar una determinación final a esta problemática que tiene como amenaza causar riesgos sanitarios a toda persona que acude a la Sala de Regidores.

"Lo único que se le pide, se le exhorta de la manera más atenta que siga consultando pero que no sea en ese lugar, nosotros vamos a hacer a través del acta de verificación, luego sigue un dictamen con el Departamento Jurídico, equipo de nosotros, y posteriormente ya vienen las indicaciones que se le tienen que dar", precisó.

"Nosotros somos unas personas muy nobles en este aspecto que apoyamos, pero que si vuelve a incurrir en el mismo error entonces ya es algo que lo quiere seguir haciendo, esperemos que todo esté bien, estamos para apoyar en todos los momentos, orientar que ahí no es el lugar indicado, hay reglamentos en los consultorios, nosotros manejamos la Norma 005 de la Secretaría de Salud y la Norma 197 de la SS, que rige los hospitales y los consultorios médicos", completó.

Expuso además que los inspectores no le encontraron el denominado 'libro de registro', que es utilizado en los consultorios donde el facultativo imprime el nombre del paciente, sus datos generales y los medicamentos que se le recetan o fármacos que se le administran, por tanto, esta situación también sería una irregularidad que se agrega a la inspección, ya que no contaba con este historial clínico.

SJ/AM