Ciudad de México.- Desde 2015, la compañía teatral Changos Negros Compañeros ha logrado combinar el talento de sus integrantes en proyectos escénicos que, a través de la música, el teatro y los títeres, buscan despertar una conciencia crítica en el público infantil y juvenil. Dirigida por Adriana Estrada, dramaturga, actriz y promotora cultural, la agrupación ha recorrido un camino marcado por la creatividad, el compromiso social y el trabajo en equipo.

En entrevista, la también fundadora de la agrupación, Adriana Estrada comparte cómo surgió esta compañía. “Nos juntamos un grupo de amigos con deseos de hacer cosas escénicas, cada uno aportando sus habilidades, ya sea en música, circo, teatro o títeres. Todo comenzó de manera informal, pero pronto sentimos la necesidad de formalizar nuestros esfuerzos y dar un mensaje claro a través de nuestro trabajo. Curiosamente, muchos de los primeros proyectos los llevamos a cabo mientras yo estaba embarazada de Emiliano, quien ahora forma parte del elenco”.

Uno de los primeros proyectos que marcó el inicio formal de la agrupación fue la obraEmiliano contra las lagartijas extraterrestres, una historia que mezcla la ciencia ficción con la crítica social, utilizando títeres y música como vehículos narrativos.

De acuerdo con la actriz, el enfoque de Changos Negros Compañeros no se limita a entretener, sino que busca generar reflexión tanto en niños como en adultos. “Queremos transmitir mensajes importantes sobre el cuidado del medio ambiente, la salud y las relaciones sociales. La idea es que, a través de nuestras obras, los niños y sus familias reflexionen sobre estas problemáticas actuales,” explica Adriana.

La compañía ha recibido varios reconocimientos por su trabajo. En 2020, fueron seleccionados por el Sistema Creación (antes Fonca) en el programa “México: Encuentro de Artes Escénicas”, lo que les permitió llevar sus montajes a diferentes festivales y foros. En 2021, participaron en “Las Formas del Arte” de Alas y Raíces y en el “Laboratorio de Identidades y Reconstrucción de las Memorias”, ambos proyectos apoyados por Coneculta Chiapas. 

En 2022, su obra Las Lagartijas Extraterrestres formó parte del Circuito de Artes Escénicas Chapultepec, presentándose en Chiapas, Veracruz, Oaxaca y Tabasco.

Entre las numerosas participaciones de Changos Negros Compañeros destaca su presencia en el Festival Cultural 12 de Noviembre y en el Caleidoscopio Galería Taller en Chiapas, así como en la Casa de las Artes y las Culturas Corazón Borraz. La compañía también ha sido parte del Festival Cumbre Olmeca en Veracruz, el Festival Infantil Hugo Montaño y el Festival Fuzz Sur en San Cristóbal de las Casas, Chiapas. Además, han presentado su trabajo en eventos internacionales como el Festival San Rocker Coneculta y en la Casa de las 8 Regiones en Oaxaca de Juárez.

Adriana Estrada ha desarrollado una carrera multifacética que abarca la actuación, la música, la dramaturgia y la producción de títeres. Además de dirigir Changos Negros Compañeros, ha creado y dirigido varios proyectos independientes. 

En 2022, fundó la división infantil de la compañía, con la cual montó la obra El pozo de los mil demonios, de Maribel Carrasco, presentada en el II Festival de Teatro Hecho por Niñas y Niños: Creando Pequeños Mundos en Chiapas. En palabras de la creadora, este proyecto, con un elenco de niños entre 9 y 11 años, es un ejemplo del enfoque inclusivo y formativo que caracteriza a la agrupación.

En lo personal, dice, ha impartido talleres de teatro guiñol y elaboración de títeres en el Programa de Fomento a la Lectura por la Red Estatal de Bibliotecas y en el Programa Identidades y Reconstrucción de las Memorias de Alas y Raíces México. 

En este sentido, Adriana Estrada refiere que su pasión por la formación de nuevos talentos la llevó a crear la obra Juegos Infantiles, con un elenco infantil dirigido por ella misma. Esta obra se estrenará el próximo 27 de septiembre en el Centro Cultural Jaime Sabines en Chiapas.

El trabajo de Changos Negros Compañeros ha dejado una huella significativa en las comunidades donde se presentan. “Es gratificante ver cómo los niños se contagian de la energía del teatro. Ellos se divierten, pero también aprenden y reflexionan sobre los temas que abordamos”, comenta Adriana. 

Actualmente, la compañía trabaja en la creación colectiva Larva, surgida a partir de un taller de máscaras con Joan Alexis, en la que Adriana participa como actriz y directora. También preparan nuevos montajes como Cojama de Mala Sombra, un proyecto de títeres que promete seguir la línea crítica y creativa que caracteriza a la agrupación.

“El teatro es un trabajo en equipo y cada producción lleva consigo el esfuerzo de muchas personas. Queremos que la gente siga disfrutando y reflexionando a través de nuestras obras”, concluye.