Durante estos días he estado leyendo al lingüista estadunidense Noam Chomsky. ¿Por qué razón? Por el interés que ahora tengo de aprender cómo funciona nuestro cerebro con respecto al lenguaje, si este es aprendido, o es que ya se encuentra integrado en nuestro cerebro como un dispositivo cerebral innato.

Si bien es cierto que se nos enseña desde niño a aprender a hablar un idioma, cómo es que con poca información recibida seamos capaces, como seres humanos, de poder realizar combinaciones de frases u oraciones, la mayor parte de ellas un tanto complejas.

Podría ser un misterio lo del dispositivo cerebral innato, mientras no tengamos información que nos lleve a dar con una respuesta científica que se tome como verdad o hecho; es decir, una teoría comprobada y aceptada por los expertos. Pero también podemos apreciar la idea de que contamos con un órgano lingüístico que nos permite desenvolvernos en sociedad a muy temprana edad, de una manera interesante.

El hecho de que se diga que el lenguaje se aprende al socializar o que haya quien enseñe a aprenderlo, tal vez sea una respuesta hasta cierto punto limitada, como limitado son a veces los procedimientos o métodos científicos para dar con una respuesta aproximada a la realidad.

Por lo tanto, podríamos decir que estamos ante dos posibles problemas:

¿El lenguaje se aprende o ya lo traemos integrado por medio de un dispositivo cerebral innato?

Noam Chomsky habla en sus teorías sobre la posibilidad del órgano lingüístico, así como también de una Gramática Universal donde se entendería algo así como que el ser humano ya trae una gramática básica en el cerebro con la cual somos capaces de poder interactuar en el mundo actual.

No es que sea conformista al aceptar la idea de Chomsky, y dejar a un lado lo del aprendizaje del lenguaje, pero me voy más por el lado de lo innato, ya que como lo he dicho antes, es asombroso lo que sucede en el cerebro humano desde el momento de nacer.

Los neurocientíficos se siguen asombrando cada vez más en cómo funciona nuestro cerebro; pero qué hacer con lo que hay ahí adentro del cerebro; cómo poder verlo; cómo interpretarlo.

No dudo que en estas cuestiones de preguntas y respuestas para ello exista la filosofía del lenguaje, o que la filosofía tenga mucho que ver en esto, porque se trata de llegar a una verdad, a una realidad aproximada, mientras la ciencia no encuentre la respuesta esperada: ¿el lenguaje se aprende desde lo exterior o existe un órgano lingüístico con el que se nace, por lo tanto, se aprende a usarlo?

Si el ser humano trajera una gramática básica ya instalada en el cerebro, ¿es por ello que somos capaces de poder realizar operaciones mentales con el lenguaje, es decir, ya traemos una estructura sintáctica?

¿Qué pasa, por ejemplo, en nuestro cerebro cuando lleva a cabo combinaciones de palabras? ¿Cómo es que realiza operaciones de desplazamiento de palabras en oraciones simples o complejas? ¿Por qué existe un mínimo error de sintaxis en el empleo del lenguaje al expresar un sentimiento o emoción?

No decimos, por ejemplo: ¡Juan, te comiste un carro! Cuando lo que en realidad lo que se comió Juan es un pedazo de carne. Es decir, no hay mucha posibilidad de equivocación al expresarnos.

¿Qué pasa en nuestro cerebro con las palabras?, ¿por qué ese órgano tan sensible y a la vez poderoso como lo es el cerebro, sea capaz de darnos infinidad de operaciones mentales para expresarnos, aunque no seamos personas con niveles de estudios avanzados, incluso, aunque no se tuvieran estudios?

Solamente he tomado como punto de partida la idea de Chomsky sobre el cerebro donde cabe la posibilidad de que exista un dispositivo cerebral innato, un órgano lingüístico capaz de realizar operaciones mentales con el lenguaje que no somos capaces de calcular, pues podría haber infinitos resultados, diferentes maneras de poder expresarnos con nuestros semejantes.

Por fortuna, como seres humanos que somos, el lenguaje lo usamos “humanamente”, de lo contrario, seríamos como robots: fríos y monótonos, expresándonos sin color, sin sentimientos ni emociones.

Ricardo Hernández Hernández
Poeta y columnista

Colaborador del portal:” Hoy Tamaulipas” hasta la fecha.
Actualmente estoy cursando un “Diplomado en Creación literaria” en la Biblioteca del Centro Cultural Tamaulipas, con el maestro José Luis Velarde.