Los partidos políticos recientemente realizaron y en algunos casos aún llevan a cabo la selección de quienes serán sus candidatos y candidatas a más de 20 mil cargos de elección popular que estarán en disputa en el proceso electoral más competitivo y reñido en la historia reciente de México a realizarse el próximo 2 de junio, en el que se renovará la Presidencia de México.

Los procesos internos de los diversos partidos políticos que conforman coaliciones y los que van solos, están registrando descontento, inconformidad y desencanto entre sus simpatizantes, militantes, bases, consejeros estatales y nacionales por las formas y métodos en los que están eligiendo a sus candidatos a senadores, diputados federales, alcaldes y diputados locales.

Durante los meses de noviembre, diciembre y enero todo aspirante y prospecto a cargo de elección popular vivía entre emoción, aplausos, reuniones concurridas, apapachos de sus seguidores, militancia y bases, trabajo y promoción de imagen, ello con el afán de lograr posicionarse en su natal ciudad, distrito y región, pero al transitar de los días y llegar el mes de marzo, las sorpresa y las manifestaciones de inconformidades y malestar se hicieron presentes, debido a que los resultados fueron adversos a sus aspiraciones políticas-electorales.

La dedicación, disciplina y el esfuerzo dedicado al partido resulto en vano, porque los finalistas y triunfadores a las candidaturas fueron los menos posicionados ante la opinión ciudadana y políticos provenientes de otros partidos.

Tal parece que el destino, la suerte y trayectoria política de la militancia activa y trabajadora no los favoreció para salir electos candidatos, ello se observa desde Tamaulipas (Matamoros, Reynosa, Ciudad Victoria) como en varias entidades del país, Colima, Nayarit, Puebla (inconformidades en Tepeaca, Ajalpan, Huehuetla, Zacatlán, Cuautempan, Tepetzintla, Ahuehuetitla, Nealtican, Cuapiaxtla, Chietla, Hueytlalpan, Atlixco, Atempan, Zaragoza, Teziutlán, Acatzingo, San Pedro Cholula, Tepeaca, Tlacotepec de Benito Juárez, Izúcar de Matamoros y Huauchinango).

Militantes activos morenitas de Guerrero integrantes del Movimiento de Organizaciones de Izquierda acudieron a las oficinas del CEN de su partido para manifestarse recientemente, por el reparto de candidaturas a puestos de elección popular,  en la que los beneficiados son políticos provenientes de otros partidos, marginando a los auténticos militantes de morena. 

En Jalisco, Claudia Delgadillo González, la candidata de la coalición Sigamos Haciendo Historia al gobierno del estado, señaló que se han registrado inconformidades hacia varios candidatos designados por el Comité Ejecutivo Nacional de Morena y las dirigencias de los demás partidos que integran la alianza en esa entidad.

En Chihuahua militantes de Morena denominado “Los de Abajo Organizados”, manifestaron su descontento afuera de las oficinas de Morena, sobre todo en contra de la designación de candidaturas, morenistas de Ixtacuixtla y Tlaxco en Tlaxcala también han hecho públicas sus  inconformidad por las intenciones que tienen el partido de ungir como candidatos a diputados y presidentes municipales, a aspirantes arribistas que vienen del PRI y de otros partidos políticos, que son ajenos al movimiento.

Lo mismo ocurre en la Ciudad de México, el malestar está presente,  políticos y simpatizantes ya hacen públicas sus quejas.

El Senador morenista José Ramón Enríquez Herrera, hizo pública su inconformidad ya que en Durango la dirigencia nacional que encabeza Mario Delgado no respetó el resultado de las encuestas, que lo colocan, dijo, como el triunfador, por lo que denunció su queja ante la Comisión de Honestidad de su partido y al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.

Los grandes perdedores hoy son los auténticos políticos con mayor arraigo en sus localidades, los que por años han presentado y realizado trabajo partidista de manera leal e institucional, sus esfuerzos, dedicación y disciplina no fueron tomados en cuenta, ni mucho menos apreciados  en esta ocasión por los dirigentes de sus partidos políticos.

Las decisiones camarales, cupulares, de grupos de poder son las que siguen imponiéndose y las que influyen en la toma de decisiones de quiénes serán los candidatos para la elección en turno y las próximas.

Sin duda de que Alito Moreno, Marko Cortés, Mario Delgado o Dante Delgado serán los actores protagónicos y los villanos. Las decisiones que están asumiendo dependerán en cierta medida del triunfo o el fracaso electoral en las urnas.

Hoy se observan caras tristes, largas, angustiadas, decepcionadas, frustradas, de enojo, amargas en varias partes del país, mientras otros hoy viven momentos de felicidad por que serán los elegidos a contender a un puesto de elección popular sin realizar tanto esfuerzo y sin tener méritos partidistas.

Políticos chapulines procedentes de otros partidos, con antecedentes penales, sin arraigo y sin apoyo ciudadano, sin trabajo partidista, con inconformidad ciudadana, hoy son los candidatos a alcaldes, diputados locales, federales y senadores que participarán en la contienda de junio próximo.

Tal parece que ello no importa si están bien relacionados y apapachados con los grupos de poder y con los que presiden las dirigencias de los partidos políticos.

Queda claro que en política nada es circunstancial, nada está escrito y sin duda una elección compleja se avecina.

Ahora ya se especula que pudiera haber voto cruzado o abstencionismo y todo por la serie de inconformidades, decepciones derivados de los resultados y sorpresas que arrojo la lista oficial de personalidades que fueron electos por las decisiones de las cúpulas del poder cargos de elección popular.

Los más listos, astutos o gandayas llegan al proceso, se comenta en política, pero para algunos aun nada está perdido, porqué aquellos audaces políticos recibirán premios de consolación, mientras los menos favorables simple y sencillamente se les dará las gracias por participar en estos procesos internos.

Sin embargo, hay un alto factor de riesgo que implica que muchos de los inconformes abandonen su militancia y se sumen a las campañas políticas de otros partidos como ya está sucediendo, debido a factores oscuros que pueden tener los individuos y que vienen asociados a su ser.

Estos factores ocultos lo integran patrones de conducta y sus emociones que son difíciles de controlar.

Ahora la voces de quejas se están pronunciando contra las cúpulas partidistas y para algunos de los inconformes el método de selección de candidatos está en duda y carente de credibilidad.

Durante décadas en México, con el Partido Revolucionario Institucional (PRI) que gobernó en todos los rubros políticos, se divulgó una presunta práctica que realizaban los Presidentes de la República para designar a su sucesor y sus candidatos, dicho proceso fue conocido en el país como “dedazo”.

Ahora a unos meses de que se realice la jornada electoral de junio próximo, algunos aspirantes a candidatos a alcaldes, diputados, senadores piden piso parejo, proceso limpio, transparente, democrático, que se respeten las encuestas, que no se impongan candidatos, se respete a la militancia que cumplieron en tiempo y forma en el registro previo a candidaturas y solicitan a los delegados estatales y nacionales no amañar el proceso interno.

Durante el mandato de Plutarco Elías Calles (1924-1928) uno de los presidentes más influyentes de la historia de México, fue el precursor de decidir su antecesor, a quien se le acusó de querer seguir teniendo el poder y aunque dejara la silla presidencial, nombró no solo a su sucesor, sino a quienes lo continuaron: el victorense, tamaulipeco Emilio Cándido Portes Gil (1928-1930), Pascual José Rodrigo Gabriel Ortiz Rubio (1930-1932), Abelardo Rodríguez Luján (1932-1934) y Lázaro Cárdenas del Río; a esta época se le conoció como el Maximato.

El desencanto de las bases, militancia y simpatizantes puede generar el fracaso de los partidos políticos, solo basta revisar la historia, porque las malas decisiones del presente sólo benefician en el futuro cercano a amigos, familiares, servidores públicos y políticos muy allegados de los que dirigen los destinos de los estados, del país y los partidos políticos.

Hoy muchos comentan que triunfó la simulación y reino el desencanto porque en política nada es circunstancial.

 Así las cosas…

Y Usted, Qué Opina..?

Nos vemos en la próxima..

Carlos Álvarez

Analista y Auditor. Consultor Externo. Certificado ante el Instituto Nacional de Ciencias Penales (INACIPE).

Libros publicados: “El Tamaulipas y el México que Anhelan los Jóvenes para el Siglo XXI”, “El Gran Juicio” y “El Lago Encantado y el Maravilloso Pueblo Azteca”. Escribe en varios medios de comunicación del Estado.