Nuevo Laredo, Tamaulipas.— El cadáver del hombre que fue recuperado del río Bravo en Nuevo Laredo el pasado lunes, no ha sido identificado todavía por las autoridades ministeriales.

La recuperación la hizo personal de Protección Civil y Bomberos, que acudió al lugar tras recibir una llamada que alertaba sobre la presencia de un cadáver a la altura del Cenizo, Texas.

Los rescatistas tuvieron que trasladar el cuerpo hasta el lugar conocido como “El Patinadero”, donde lo sacaron del agua y lo pusieron a disposición de las autoridades.

El hombre, que vestía ropa de color negro, no portaba ninguna identificación ni documentos que pudieran ayudar a su identificación.

Se calcula que tendría entre 30 y 40 años y que habría permanecido bajo el agua durante unas tres semanas. Según el reporte, el cuerpo presentaba signos de descomposición y depredación por la fauna del río.

El cadáver fue llevado a la funeraria, donde se espera que algún familiar o conocido lo reconozca y lo reclame. De lo contrario, será sepultado en una fosa común.

Las autoridades no descartan la hipótesis de que el hombre fuera un migrante que intentaba cruzar la frontera por el río, pero que fue vencido por la corriente y perdió la vida.

Este sería el primer caso de este tipo que se registra en el año en la zona de Nuevo Laredo, donde el flujo migratorio se ha incrementado en los últimos meses.