La Guardia Nacional no será un brazo operativo de las Fuerzas Armadas ni obligatoriamente habrá de jefaturarla un militar --como lo proyectara Andrés Manuel López Obrador--, pues el pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) echó por tierra el decreto presidencial, al quitarle facultad a la Secretaría de la Defensa Nacional (SeDeNa) de proponer comandante de dicha corporación. 

Incluso, eliminó el requisito de que el titular sea un individuo con grado jerárquico castrense, por vulnerar la regla de adscripción a la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Ciudadana (SSPC) y poner en tela de juicio su carácter civil. 

Con la resolución judicial se alejaría la amenaza de militarizar al país y se frenaría el espionaje del ejército sin orden judicial. 

Pero hay que esperar el plan ‘b’ lópezobradorista –como siempre--, en respuesta al revés a su decreto de ‘entregar el control de la seguridad a los militares’, como lo observaron, desde que éste fue promulgado, analistas y estudiosos de la administración pública; políticos y empresarios. 

Por vía de mientras, la Guardia Nacional --integrada por más de 60 mil elementos improvisados para ejecutar sus tareas-- sigue formando parte de la SSPC, cuya titular es la hoy aspirante presidencial Rosa Icela Rodríguez Velázquez, según lo determinó la SCJN el martes próximo pasado (abril 18 del año que cursamos). 

Y entre sus funciones, destacan: 

+ Generar información de inteligencia para la prevención del delito; 

+ Adscribirse al mandato de la Fiscalía General de la República (FGR), en la investigación de delitos del orden federal; 

+ Colaborar con el Poder Judicial de la Federación para el resguardo y la protección de los elementos humanos y materiales --involucrados en una investigación o proceso penal--, además de ejecutar mandatos judiciales; 

+ Ejercer como fuerza de reacción y combate, ante delitos que ocurran en sus áreas de responsabilidad; 

+ Colaborar con autoridades e instituciones de seguridad pública, tanto municipal como estatal en acciones de combate o investigación del delito; y 

+ Coadyubar a cualquiera de las Fuerzas Armadas, en el cumplimiento de sus funciones, cuando lo requiera el presidente de la república. 

Esto, en estricto apego a su función reglamentaria. 

Lo negro 

Desde su creación (26 de marzo de 2019), la Guardia Nacional ha incurrido en excesos graves contra el pueblo mexicano, provocando su presencia en varios estados no una impresión de seguridad, sino de temor marcado, con justificada razón, como lo han documentado notas periodísticas, denuncias, acusaciones ciudadanas directas e incluso, videograbaciones, apareciendo sus elementos incurriendo en casos de cohecho y abuso de autoridad. 

Para muestra, bastan algunos botones: 

1. a) El uso de gases lacrimógenos para impedir el ingreso a este país de migrantes centro-sudamericanos y de otras nacionalidades, al cruzar el Río Suchiate que divide a Guatemala y Chiapas, sobre el municipio de Frontera Hidalgo (sito del lado mexicano);
2. b) La intimidación, represión y/o agresiones hacia quienes transitan las carreteras que conectan a Belice y Guatemala con Quintana Roo, Tabasco, Campeche y Chiapas --sean extranjeros o connacionales-- a lo largo de mil 149 kilómetros;
3. c) La persecución de indocumentados en la frontera norte de México al intentar estos ‘brincar’ a la Unión Americana sobre distintos puntos de los 3 mil 152 kilómetros de la línea divisoria --que aparecen entre Baja California, Sonora, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas (acá de este lado) y los estados yanquis de California, Arizona, Nuevo México y Texas-- como lo han documentado puntualmente organismos defensores de los derechos humanos;
4. d) Las denuncias en su contra por la comisión de irregularidades entre las que destacan: detención arbitraria, empleo de la fuerza arbitraria y trato cruel, inhumano y degradante; retención ilegal, prestar indebidamente todo servicio público, intimidación y ejercer la violencia desproporcionada en las detenciones, que registra el Sistema Nacional de Alerta a la Violación a los Derechos Humanos; y
5. e) Los atracos a ciudadanos cometidos a plena luz del día por algunos de sus elementos, aunque mínimos en comparación con los asaltos que en la penumbra ejecutaban, aunque dicen que todavía los cometen.

Esto echó por tierra el proyecto del tabasqueño, quien ofreció que esta nueva institución era importantísima para garantizar la paz, sin excesos, sin autoritarismo, respetando los derechos humanos por, su control, estar ‘bajo mando militar’. 

Ciertamente, las instituciones que más procuran la estabilidad del país son la SeDeNa y la Secretaría de Marina (SEMAR), al través del ejército, la Fuerza Aérea Mexicana y la Armada de México. 

Pero, lamentablemente, sus altos mandos y elementos de base se han excedido, como acusan organizaciones empresariales, académicas y todos absolutamente todos, los organismos defensores de los derechos humanos. 

Y por ello cobra capital importancia la decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación al ordenar que, la GN, esté supeditada a la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Ciudadana, invalidando al mismo tiempo que su titular sea un militar con grado. 

Esto detiene, por el momento, la militarización delo país. 

Ya ve usted que López Obrador ha entregado a las fuerzas armadas no sólo el asunto de la seguridad nacional, sino también, la construcción de obras; el control de las aduanas y otros organismos de seguridad nacional. 

Mar de aspirantes 

De por sí la oposición no cuenta con cuadros significativos para darle pelea a cualquier personaje que resultare candidato presidencial de Movimiento Regeneración Nacional (morena), hay grupos de interés que arman foros, a fin de promover aspirantes ‘aliancistas’ (PAN-PRI-PRD) por creer que así le harían competencia a los aspirantes guindas, cuando, de antemano, saben que sus intenciones rayan hacia el fracaso. 

En la palestra aparecen (por orden alfabético) Beatriz Paredes Rangel, Claudia Ruiz Massieu Salinas, Demetrio Javier Sodi de la Tijera; Emilio Álvarez Icaza Longoria, Enrique Octavio de la Madrid Cordero, Idelfonso Guajardo Villarreal, José Ángel Gurría Treviño, Juan Carlos Romero Hicks, 

María Lilly del Carmen Téllez García, Miguel Ángel Mancera Espinosa, Santiago Creel Miranda y Silvano Aureoles Conejo. 

Más los que se acumulen esta semana. 

Pero, insisto, sin posibilidad alguna de ganar. 

Correo: jusam_gg@hotmail.com 

Caminante no hay camino 

La división entre la militancia de morena está a punto de hacer crisis, aquí en Tamaulipas, pues los operadores de Adán Augusto López Hernández y Marcelo Ebrard Casaubón se alistan para confrontarse con los impulsores de Claudia Sheinbaum Pardo. 

Hace días estuvo por estas tierras el senador Ricardo Monreal Ávila, quien se dice el hermano pródigo de los tres aspirantes a la candidatura presidencial –él también lo es--, pero evitó hablar de más sobre la carrera interpartidista; en tanto Claudia dictó ayer una conferencia en Reynosa, con lo que inició su placeo por el noreste del país. 

En julio próximo se hará publica la convocatoria de morena, según ha dicho su dirigente Mario Martín Delgado Carrillo, quien se la juega en favor de Adán Augusto con su séquito ‘carmonizado’ que, por cierto, coordina el diputado federal Erasmo González Robledo. 

Las encuestas más recientes colocan a Sheinbaum por encima de las demás ‘corcholatas’, aunque los sondeos no involucran a Rosa Icela Rodríguez ni a Gerardo Fernández Noroña, quienes ya le entraron, aunque precariamente, a la guerra de espectaculares, bardas rotuladas y mensajes en las redes sociales.  

Se hace camino al andar 

En su primer informe como rector de la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT), Guillermo Mendoza Cavazos, destacó los avances que ha tenido el alma mater durante su ejercicio. 

Por cierto, estos fueron avalados por el gobernador Américo Villarreal Anaya. 

El rector manifestó que el proyecto universitario es adecuarse a los nuevos tiempos, para así lograr que los egresados mantengan un nivel de alta competitividad en su ejercicio. 

Un objetivo que comparte el jefe del Ejecutivo estatal, al ofrecerle todo su apoyo para desarrollar las tareas establecidas. 

Esto, obviamente, despejas dudas en cuanto a la relación entre ambos para beneficio de la UAT. 

Cicuta 

Debe darse el manotazo del secretario general de Gobierno, para al menos frenar la grilla reeleccionista de algunos alcaldes, cuando estos apenas han transitado la primera mitad de su período constitucional. 

Ellos están en campaña abierta, con afanes releccionistas. 

Mientras tanto, ‘El Calabazo’ se mantiene indolente. 

¿Acaso en espera de que su jefe sea quien los ponga en paz? 

Juan Sánchez Mendoza

Ha ejercido el periodismo durante más de tres décadas, alcanzado premios estatales en dos ocasiones; autor del libro "68. Tiempo de hablar"(que refiere pormenores del memorable movimiento estudiantil); autor de ensayos literarios; y reportero de investigación de tiempo completo, acá en territorio nacional y más allá de nuestras fronteras y del continente americano.