Monterrey, NL (Agencia Informativa de México).- El gobierno federal subsidia con 12 pesos el precio de cada litro de gasolina en México, para evitar una mayor contracción de la canasta básica en la economía interna, reveló la Secretaria de Hacienda y Crédito Público (SHCP).

Rodrigo Mariscal, titular de la Unidad de Planeación Económica, señaló que, para mitigar el aumento en el costo de la gasolina, se decidió aumentar el subsidio que se aplica al Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS).

Puntualizó que “el precio por litro de la gasolina ronda los 22 pesos, pero el subsidio al IEPS solventa 12 pesos, por lo que el precio real del litro de gasolina sería de 34 pesos por litro”.

La SHCP, aseguró, “cuenta con un espacio fiscal suficiente para mantener el apoyo al IEPS de la gasolina, sin poner en peligro la estabilidad de las finanzas públicas”.

El aumento de los precios del petróleo es consecuencia de los problemas globales que se han presentado en los últimos años, indicó.

Expresó que la pandemia, la guerra en Ucrania y la respuesta de China frente a estos acontecimientos, ha generado que la oferta y la demanda de los insumos, que utilizan casi todas las industrias, se vean afectados, lo cual tiene un efecto en los precios de los productos.

El subsidio al IEPS, dijo, forma parte de una estrategia con tres puntos clave: proteger, abaratar y estabilizar el precio de los combustibles.

Esta estrategia denominada PACIC (Paquete Contra la Inflación y la Carestía) plantea, desde esos tres puntos clave:

Proteger el abasto de la ciudadanía, abaratar los precios —principalmente de las gasolinas y energéticos— y estabilizar precios de la canasta básica, con la intención de que la inflación no siga aumentando.

Refirió que este subsidio al IEPS representará un gasto del gobierno cercano al 1 por ciento del PIB, en términos de recaudación, pero el volumen de ventas de petróleo, a un precio mayor, compensará este mayor subsidio, por lo que se prevé que este fenómeno tenga un efecto neutro en las finanzas públicas.

Las gasolinas, apunto, se ocupan en el 60 por ciento del transporte de carga, lo que implica un impacto enorme en el precio de todas las materias primas.

La intención de brindar el apoyo al IEPS responde a que es un insumo que impacta a todos los niveles, enfatizó.

Estimó que las personas que se encuentran en un decil alto gastan 10 por ciento de sus ingresos en gasolina; en tanto, las que se encuentran en un decil bajo, en promedio 8 por ciento.

 Aunque el porcentaje es menor, expuso, sigue siendo muy significativo en términos absolutos, ya que representa la misma cantidad de recursos que destinan, por ejemplo, a comprar carne de cerdo.

“Si se deja que la gasolina suba de la forma que lo ha hecho en lugares como Estados Unidos, al doble, lo que se estaría haciendo es quitar consumo a las personas de bajos ingresos”, aseguró.

Concluyó que “las políticas fiscales se basan en unas reservas sólidas de más de 200 mil millones de dólares, con un déficit fiscal relativamente bajo, que se calcula alrededor de 3.1 por ciento, lo cual, incluso en escenarios de estrés financiero, podría controlarse sin perder estabilidad”.