Altamira, Tamaulipas.- Aunque han logrado realizar la captura de ladrones e incluso violadores sin recibir un solo peso, el gobierno de Altamira que encabeza Armando Martínez Manríquez ignora por completo a los hombres y mujeres que integran el cuerpo de veladores.

Los vigilantes nocturnos de la urbe industrial buscan coadyuvar en la reducción de los índices delictivos en el municipio.

Sobre el tema, Ramiro Antonio Ramírez Reyes, integrante de los veladores del sur de Tamaulipas, dio a conocer que durante el periodo vacacional de Semana Santa, tuvieron que redoblar esfuerzos para recorrer los complejos habitacionales y escuelas, que normalmente son visitados por los amantes de lo ajeno.

"Estamos trabajando en nuestro horario exigido por el sindicato de hasta las cinco de la mañana, con el fin de hacer mayor presencia en las colonias para reducir los delitos".

Reconoce que son aproximadamente 80 vigilantes nocturnos, los que recorren un mismo número de colonias en el sur de Tamaulipas, los cuales se enfrentan con pocos aditamentos para hacer su trabajo diario".

Al ser cuestionado sobre si el alcalde de Altamira Armando Martínez Manríquez, les cumplió las promesas de ayudarles para su equipamiento, expresó que hasta el momento todo sigue en el tintero.

Pero eso no ha sido impedimento para continuar realizando su labor preventiva.

"Ahorita no hemos tenido apoyo del municipio, anteriormente hablamos con el presidente, quien nos dijo que nos iba a apoyar, pero no hemos recibido nada. Sin embargo continuamos trabajando con ayuda de la ciudadanía, quienes nos dan el respaldo".

Destacó que los miembros del sindicato al que pertenece, tienen que enfrentar constantes agresiones de los llamados veladores libres, quienes de manera desleal buscan adueñarse de los territorios.

"Todavía hay pleito entre nosotros los veladores contra las personas que son libres, pero hay gente que nos están conociendo y que les brindamos mayor seguridad para sus familias".

Sin embargo la aceptación que han tenido de parte de la misma ciudadanía les ayuda a mantenerse activos a pesar de no contar con el apoyo de las autoridades de Altamira, mientras no bajan la guardia para hacer las colonias más seguras.