Tampico, Tamaulipas. - Especialistas hidráulicos agrupados en la unión de Profesionistas en Acción de la Zona Conurbada hicieron un llamado urgente a las autoridades federales, pero en especial al Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador para que se atienda la problemática que se está sufriendo en el Sistema Lagunario del Río Tamesí-Chairel.

Lo anterior después de las fugas en el dique del Estero El Camalote, el ingreso de agua salada y las afectaciones a la biodiversidad de las lagunas, “es así que debe declararse por este motivo un estado de emergencia por las afectaciones que se están registrando en varios órdenes”, expresó el especialista medioambiental Andrés Bonilla Ibarra.

Agregó que el grupo de Profesionistas en Acción, que está conformado por biólogos, contadores, abogados, académicos e ingenieros, están pidiendo ahora al presidente de México que voltee al norte del País, pues la crisis del agua está dañando cultivos, la biodiversidad y a la vida humana.

Dijo que la problemática que empezó con las fugas del agua del vaso de captación con lo que se disminuyó la reserva de agua dulce, se vio afectada más tarde por el agua salada que empezó a ingresar al sistema lagunario y que proviene del río Pánuco y del Golfo de México, derivando que el organismo operador del agua entregue agua salada a los habitantes, quienes buscan ahora agua purificada como alternativa para sus quehaceres domésticos.

"Vamos a insistir el llamado al Presidente de la República para que voltee a ver la gente del norte, él siempre ha estado apoyando sin lastimar a nadie, pero ha sido mucho para el sureste y nosotros hemos estado un poquito olvidados, decirle que nos ayude, porque recursos (económicos) en el país yo tengo fe que sí hay para arreglar este problema, de no hacerlo vamos a tener aquí un impacto humano muy fuerte, ya lo están viendo, el impacto económico no tarda, las plantas purificadoras van a cerrar, están sintiendo el problema, más del 60 por ciento de la población no compra agua de botellón porque no les alcanza", precisó.

"Desde luego que sí (se puede declarar zona de emergencia), vamos a tener que recurrir a ese tipo de estrategias, porque eso es cierto; va a impactar la parte económica, va a impactar el medioambiente que ya lo está impactando, la salud humana, nosotros no podemos estar sin agua dulce, es como cuando ocurre un terremoto, la gente se queda sin nada, es importante explicar que estamos en estado de emergencia, desde luego que sí (se pedirá esa declaratoria)", completó.

En este llamado, precisó, todos los sectores sociales, empresariales, pesquero y agrícolas deben alzar la voz para pedir se atienda esta emergencia que ahora mismo se registra en la zona conurbada, y donde todas las secretarías de la Federación, de Salud, Pesca, Economía, Hacienda y Gobernación, entre otras, deben poner su atención para dar soluciones a corto, mediano y largo plazo.

En este contexto, el ingeniero Bonilla Ibarra manifestó que la solución es que con premura se cierren las fugas que tiene el dique del Estero El Camalote, se eche a andar un plan regional hídrico estratégico que dé una solución integral para garantizar el abasto de agua potable para el fin del siglo, creando ollas de agua dulce para no sufrir desabasto en épocas de estiaje, además que la zona federal de los estuarios sea delimitada, y que se involucren todos los municipios de la subcuenca del río Pánuco, tanto del sur de Tamaulipas como del norte de Veracruz y oriente de San Luis Potosí, entre otras prioridades.

Entre los asistentes de la agrupación de especialistas estuvieron además Maritza Hernández Hernández, Miguel Ángel Verástegui Cavazos, Joel Ruiz San Juan, Alejandro Margain Hernández, Jesús Herrera Gómez, Francisco Eugenio Medina Eliard, Jesús Pérez Cobos, Adolfo Garza Díaz, Jesús Manuel Guerrero García, Javier Hernández Rivera y José Luis Cabrales Espinoza, este último agricultor de la comunidad del Estero El Camalote, quienes expusieron que la situación es muy delicada, por tal motivo apremia que el Gobierno de México intervenga urgentemente.

Bamp