Monterrey, Nl.- La Secretaría de Salud federal determinó que hoy se celebre el Día Nacional de las Personas Mayores, en lugar del Día de los Abuelos, para emplear un lenguaje más incluyente con las mujeres y evitar el neoliberalismo  entre los mexicanos.

La dependencia federal señaló que en México, en 1998 se instituyó en todo el país, el 28 de agosto como Día del Anciano.

Este título, resaltó, “fue cambiado  a Día Nacional del Adulto Mayor, con la clara intención de emplear un lenguaje incluyente, que considere también a las mujeres mayores, quienes forman la mayoría de este grupo poblacional “.

Por ello, indicó, “hemos decidido proponer llamar a este día, `Día Nacional de las Personas Mayores, pues abuelos es una denominación que tampoco incluye a las abuelas “.

Aclaró que  “ni todas las personas mayores son abuelos o abuelas, ni todas las abuelas o abuelos son personas mayores”. 

Recalcó que “este 28 de agosto conmemoramos en México el “Día Nacional de las Personas Mayores”.

“La celebración de este día nos ofrece un espacio, no sólo para felicitar a las personas mayores por el hecho de serlo, sino para brindarles un reconocimiento por sus aportaciones actuales y potenciales al desarrollo cultural, social, económico y político de nuestra sociedad y de sus comunidades", expresó.

Este año, dijo,  la celebración del Día Nacional de las Personas Mayores se lleva a cabo en medio de una crisis sanitaria, que ha puesto de manifestó las grandes debilidades de la sociedad actual.

 Muy  en particular, enfatizó,  “las enormes desigualdades y discriminación que enfrentan las personas mayores y nos obliga a reflexionar sobre su situación en dicho contexto".

“El incremento de la esperanza de vida y el consecuente acelerado crecimiento de la población de personas mayores fue visto, durante el periodo neoliberal, no como el gran logro de la humanidad, sino como un problema, como una pesada carga financiera para los sistemas de salud y de pensiones" , expuso.

Sostuvo que “la vejez se convirtió en sinónimo de vulnerabilidad, enfermedad y dependencia".

La dependencia  federal aseguró que  “una visión estereotipada de la vejez ha llevado a que se estigmatice y se discrimine a las personas mayores, en muchos casos, señalándolas como población vulnerable en general".

Manifestó que se ha obligado a percibirla “como la población más susceptible de contraer el virus y por tanto de trasmitirlo e incluso, en algunos casos extremos, como una población que podría ser sacrificada o debería auto sacrificarse para dar preferencia de atención a las personas más jóvenes”.

“No todas las personas mayores están en condiciones de vulnerabilidad o dependencia, y si bien, algunas personas padecen enfermedades como diabetes o hipertensión", señaló.

También aclaró que  “en su mayoría, dichas enfermedades no aparecieron al llegar a la vejez, sino que son producto de un curso de vida determinado por las condiciones socio económicas".

“Cada persona" , continuo  “envejece de forma diferente, las condiciones que en el curso de vida nos afectan como individuos y como integrantes de nuestras comunidades, determinan hoy las condiciones en que enfrentamos la crisis sanitaria".

Refirió que la estrategia para la mitigación de la epidemia, en el caso de las personas mayores, hizo énfasis en que se quedaran en casa y que no fueran visitados, centrándose casi exclusivamente en las personas mayores que viven solas “.

“ Poco se consideró a las que viven acompañadas, a las que realizan labores de cuidado dentro y fuera de su hogar y a las que tienen que salir a trabajar”, dijo.