Beirut, Líbano.- El Ministerio de Salud libanés elevó al menos a 182 el número de muertos por la explosión que se produjo el 4 de agosto en el puerto de Beirut, con un saldo más de 6 mil personas heridas, mientras que otras 30 personas continúan desaparecidas.

El Ejército libanés sitúa en 30 las personas que siguen desaparecidas y que se estima pueden estar bajo los escombros de la explosión generada por 2 mil 750 toneladas de nitrato de amonio almacenadas en un galpón del puerto que afectó a toda la capital libanesa.

El presidente libanés, Michel Aoun, pidió hoy a los afectados por la explosión que “se aferren a sus tierras, hogares y la identidad de su ciudad, Beirut”.

Asimismo, recordó que el proceso de “compensación para los afectados será rápido, eficiente y justo”, subrayando que las pérdidas producidas por la catástrofe rondan los 15 mil millones de dólares.

Más de la mitad de los centros de salud públicos y privados de la capital libanesa se han visto afectados, lo cual ha dificultado no solo la atención de los heridos por la deflagración, sino también el tratamiento de enfermos de covid, que ha vuelto a repuntar en medio de la tragedia.

Tanto las agencias de la ONU como organizaciones humanitarias y la comunidad internacional están apoyando al Líbano con el envío de suministros y ayuda médica adicional.

Por otra parte, las autoridades libanesas anunciaron un toque de queda nocturno a partir de ayer 21 de agosto y hasta el 6 de septiembre, ante el repunte de contagios por el nuevo coronavirus tras la explosión.

El Ministerio de Interior libanés informó que el toque de queda se implementará de las 18.00 a las 06.00 hora local para los ciudadanos, mientras que los comercios y negocios como bares y restaurantes tendrán que cerrar a las 17:00 horas.