Roma, Italia. - A 28 años del trágico asesinato del juez Paolo Borsellino y cinco de sus escoltas, el presidente de Italia, Sergio Mattarella, los recordó renovando la cercanía y la participación en el duelo insaciable de sus familias. 

 “Después de muchos años, el dolor, la indignación y la angustia por ese ataque atroz contra un magistrado símbolo del compromiso contra la mafia, que compartió con su inseparable amigo Giovanni Falcone los ideales, objetivos y métodos de investigación de gran éxito”, acotó.

El Juez Giovanni Falcone había sido asesinado 56 días antes del atentado contra el magistrado Borsellino, y es que, ambos, junto con varios magistrados, habían participado en el llamado maxi-proceso de Palermo, un juicio histórico contra Cosa Nostra, donde cerca de 500 integrantes de la mafia fueron imputados, esto inició en febrero de 1986 y concluido en enero de 1992.

El mandatario italiano señaló que el 19 de julio de 1992, una terrible explosión en Vía D’ Amelio en Palermo rompió la vida de Paolo Borsellino y cinco agentes de su escolta, Emanuela Loi, Agostino Catalano, Vincenzo Li Muli, Walter Eddie Cosina y Claudio Traina.

Y es que ese día, la mafia italiana, Cosa Nostra, decidió eliminarlo, una explosión de un coche bomba cuando el magistrado iba a ver a su madre en la Vía D’ Amelio de Palermo.

Sergio Mattarella aseguró que Borsellino representaba, con su personalidad y su comportamiento, “todo lo que la mafia y sus acólitos detestan y temen más: coraje, determinación, incorruptibilidad, sentido del estado, conocimiento de fenómenos criminales, competencia profesional”.

Y agregó que su reputación como magistrado ejemplar aumentó la simplicidad y la capacidad de trabajar en equipo, lejos de las personalidades y los deseos de liderazgo. A esto se sumó la firme voluntad de continuar, de no rendirse incluso ante riesgos, ataques, malentendidos y hostilidades.

“Estoy particularmente cerca de los niños de Paolo Borsellino en este triste aniversario. Como experimentan a diario, nada puede compensar una pérdida tan grave”, dijo.

Recordó que el juez Borsellino, afirmó en alguna ocasión que “quien muere por legalidad, justicia, liberación del yugo del crimen, no muere en vano”, por lo que continuará mostrando a los magistrados, ciudadanos, jóvenes el camino del coraje, de la intransigencia, moralidad, fidelidad auténtica a los valores de la República.

Paolo Borsellino, quien estaba amenazado por la mafia italiana, ocho años atrás había declarado ante la Comisión Parlamentaria Antimafia, días previos al atentado había dicho respecto a la extrema seguridad con la que contaba.

“El coche blindado está disponible por la mañana. Por la tarde utilizo mi automóvil y regreso a casa a las 21 ó 22 horas de la noche. Así recupero mi libertad. Pero no comprendo qué sentido tiene perder la libertad por la mañana para después ser libre de ser asesinado por la tarde”, dijo.