Matamoros, Tamaulipas.- La Casa del Migrante se ha visto saturada debido a la gran cantidad de migrantes y deportados que siguen llegando a Matamoros, situación que ha originado que la comunidad católica que se encarga de la administración de la misma, pida a la población el apoyo para abastecer de ropa a las personas que llegan de otros países.

Es por eso que se abrió un centro de acopio en la iglesia de la Virgen de Guadalupe, en donde se está pidiendo principalmente pantalones de las tallas, 30, 32, 34 y 36, ya que se les agotaron ante la cantidad de ciudadanos que están atendiendo.

A través de las redes sociales, el padre Francisco Gallardo encargado de la Casa del Migrante, dio a conocer a la comunidad que cada día llegan más hermanos de otras nacionales, entre deportados y migrantes que vienen en busca del asilo político.

Puntualizó que debido a esta cantidad de personas, se acabaron las literas en donde descansan las mismas, por lo que ahora están durmiendo en el suelo en colchonetas, sin embargo la necesidad de ropa es importante.