Tampico, Tamaulipas.- Los creyentes y sacerdotes de la Iglesia Católica de Tampico deberán estar a la espera de que Roma realice la misa exequial por el fallecimiento del papa Francisco, para que pueda desarrollarse la misa del funeral diocesano en la Catedral de este Puerto, así lo manifestó el vocero de la Diócesis porteña Néstor Javier López Rodríguez.

Advirtió por tanto que una vez que se realice esta misa exequial en Roma el obispo de Tampico, en este caso el administrador apostólico monseñor Oscar Efraín Tamez Villarreal convocará a la misa del funeral diocesano, por lo que antes de las actividades oficiales que se desarrollarán en Roma nada se puede hacer en el resto de los templos católicos.

"Estamos estimando que para el fin de semana se tendrá la misma exequial por el eterno descanso del santo padre, el papa Francisco, y me atrevo a decir el fin de semana porque era uno de los días que iba a estar muy visitada la Ciudad del Vaticano porque estaba programada la canonización del beato Carlo Acutis, beatificación que por obvias razones se va a posponer, digo, esto todavía no es oficial", indicó.

"Aquí hago esta precisión, antes de esta celebración no se podrá celebrar ninguna misa exequial, una vez que haya sido celebrada en Roma, durante este periodo del novenario, se organizará en cada diócesis un funeral diocesano que será convocado por el obispo, en este caso por nuestro administrador apostólico, así mismo una vez que se haya realizado el funeral diocesano cada comunidad parroquial podrá establecer el día y la hora en que realizarán esta misa ahora a nivel parroquial, hago esta precisión para que lo tengamos nosotros presente, primero tiene que hacerse la misa allá en Roma, y después ya en el novenario se hace la misa en la Diócesis", completó.

En este mismo sentido, el vocero de la Diócesis de Tampico estableció que a la muerte del papa Francisco y bajo la condición de diócesis en sede vacante, en los templos de la circunscripción católica no se detiene nada, y deberán proseguir con las actividades y servicios ya marcados, hasta la llegada del nuevo obispo, pues los trámites para nombrarlo no se detienen.