Ciudad Madero, Tamaulipas. - Hace un año la vida de don José y su esposa Gregoria cambió para siempre, el derrumbe de la parroquia de la Santa Cruz en Madero les arrebató a su única hija Norma Edith, dejando en orfandad a un niño de apenas cuatro años de edad, el cual la Iglesia Católica se ha negado a ayudar.

El derrumbe de la parroquia de la Santa Cruz, ubicada en la esquina de las calles Nuevo León y Chihuahua de la colonia Unidad Nacional, le costó la vida a 12 personas y dejó a 69 lesionadas, los familiares de los deudos siguen a la espera de justicia por parte de las autoridades de Tamaulipas.

En una entrevista exclusiva, el señor José Pérez se dijo indignado por la resolución de la Fiscalía General de Justicia del Estado emitió el no ejercicio de acción penal al no encontrar delito.

Don José recordó a su hija Norma Edith como una mujer trabajadora y alegre, y una gran madre que se hacía cargo de su hijo, por lo que incluso suplicó al obispo de Tampico, José Armando Álvarez Cano ayuda para el infante, sin tener una respuesta hasta el momento.

En el lugar donde ocurrió la tragedia sólo se encuentra una imagen de la Virgen de Guadalupe, así como los nombres y fotos de algunas de las víctimas, mientras que sus familiares siguen luchando porque se haga justicia.