En medio de asuntos que han causado controversia a nivel nacional, debido a cuestiones derivadas de la reforma al poder judicial y otros aspectos políticos, hay que tener los pies bien puestos en la tierra. Independientemente de la postura que cada quien pueda tener, se tendría que hacer énfasis en los aspectos importantes para reformar positivamente aspectos importantes de nuestro país.

A estas alturas pareciera que la polarización es tal que se ve muy complicado que genuinos procesos de cabildeo entre las distintas de fuerzas políticas opositoras se puedan dar. Con todo lo que represente esto, siempre existirán puntos de acuerdo en los que se puede comenzar a construir consensos, la cuestión es que si existe la voluntad de hacerlo.

Revisando nuestra historia, sabemos que esto no es algo nuevo ni privativo solo de nuestra nación, es solo un episodio más dentro del entorno socio político de México. Y esto sucede igual porque precisamente son muchos de los mismos personajes que desde hace muchos años son los que prevalecen en las riendas de poder y/o toma de decisiones.

“Chango viejo no aprende maroma nueva” diría mi padre y parece que eso es algo que aún padecemos. Se han hecho esfuerzos importantes por ir creando una renovación ideológica y de cierta manera generacional, pero aún parecieran estar enquistadas muchas de las formas de antaño.

Quizá sea todo parte de un proceso mayor reformatorio o quizá es momento de tener un verdadero proceso de inflexión. Lo cierto es que la polarización extrema nunca ayudará y el futuro de nuestro país depende de las acciones que ahora se tomen y de las determinaciones que surgirán.

En todo esto espero estén muy atentos las generaciones más jóvenes, viendo y analizando los acontecimientos y reflexionando sobre los factores tanto positivos como negativos de lo que actualmente sucede. Ellos y nadie más que ellos serán los verdaderos reformadores de nuestra nación, para bien o para mal.

El tener posturas diversas o equilibrios de fuerzas siempre será sano, y esto lo pueden estudiar en los diversos acontecimientos de tal índole en nuestra historia universal. Haríamos bien todos aquellos de generaciones mayores, en inculcar a los más jóvenes que expandan su mente y que se preparen bien, para que sean ellos los que puedan destrabar aquello que hasta hoy no se ha podido.

Recientemente estuve en un evento universitario, en donde cientos de jóvenes confluyeron. Recordé aquellos tiempos míos universitarios en donde el brío juvenil, la inocencia y las hormonas estaban a la orden del día. Esa época donde comenzaba más en forma a forjar la ideología que ahora poseo.

Me dio gusto que en este caso la Universidad Autónoma de Tamaulipas, por vía de su Rector, Dámaso Anaya Alvarado, convoque y prioricen el espíritu de unidad y que a su vez alienten la superación personal y profesional como bien se reflejó en la plática de la expositora Gabriela Perales.

Y hablando de jóvenes, el actual Secretario del Trabajo del gobierno del estado de Tamaulipas, Gerardo Illoldi, sorprendió por su frescura, arrancando a su vez muchos aplausos y apoyo de los ahí presentes en su intervención, quien fue seguido por un mensaje de aliento, unidad y de prosperidad por parte del rector. 

Son precisamente ellos y los miles de jóvenes en nuestro país quienes tienen en sus manos incidir en el presente y forjar un mejor futuro para todos. Son ellos quienes verdaderamente puedan revelarse y alzar la voz en su momento pero sobre todo con sus acciones, enmendar todo aquello que hasta ahora sigue muy enredado.

E independientemente de las preferencias políticas, recordar que este tipo de cosas son más asuntos de valores y no de colores y que aún en momentos muy ríspidos, se pueden llegar a consensos, siempre buscando la concordancia más que incitar a la intolerancia. 

Las buenas acciones no siempre son las que se publicitan.

De regreso de dicho evento, me percaté de la visita y de una sana convivencia entre el Secretario de Salud, Vicente Joel, en el centro oncológico, con decenas de trabajadores que en armonía conversaban y convivían. Sin reflectores, estas son acciones que fortalecen. Al igual que su participación reciente en actividades deportivas y sociales.

Debate Trump vs. Harris     

Muy buena oportunidad para ver el desenvolvimiento de ambos candidatos presidenciales en un foro de debate. Trump muy a su estilo y Harris muy bien plantada y preparada para el momento. Las elecciones en Estados Unidos estarán muy buenas, hasta ahorita nada para nadie pero ayer en mi opinión, fue un paso sólido para la candidata demócrata. Abundaremos después.       

Jorge Alonso Infante Alarcón  

Carrera Licenciado en Relaciones Internacionales.

Maestría en Administración Pública en la U.A.M. Francisco Hernández García (U.A.T.)