Altamira, Tamaulipas. - El temor de perder el control de la Comisión Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (Comapa) de Altamira, tiene al alcalde Armando Martínez Manríquez en una confrontación contra el gobierno de Américo Villarreal Anaya.

La intención del gobierno de Tamaulipas es que la Secretaría de Recursos Hidráulicos se haga cargo de las comapas, pasando el organismo a manos estatales como ocurre en Tampico.

Sin embargo, la idea no es del agrado de Martínez Manríquez, quien tiene las manos metidas en la Comapa y que tiene como un simple empleado al gerente general Omar Hernández Leines.

El mensaje del alcalde morenista es claro: “la Comapa de Altamira es de Altamira y los altamirenses”, revelándose totalmente al gobierno de Villarreal Anaya.

Según datos difundidos, en el organismo dio de alta como empleado a Juan José Martínez Manríquez con un salario de casi 30 mil pesos, así como a su cuñada María del Carmen Luque Pérez con casi 20 mil pesos.

Hay que señalar que el gobierno de Altamira tiene a su cargo a la Comapa y por ende el dragado del sistema lagunario, el cual se ha realizado con poca transparencia.

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