Cuando Erick Silva era alcalde de Matamoros, su cuate Héctor Silva estaba encargado -entre otras cosas- del programa de apoyo a los Adultos Mayores en el Sistema DIF. Hizo de los abuelitos, la bandera para promover sus aspiraciones, aspiraciones que nunca prosperaron. Quería ser presidente municipal.

De manera extraoficial, el “cuate” también era el encargado de las cuotas que los funcionarios municipales, siendo Gobierno, tenían que aportar al partido para su sostenimiento.

Eran los tiempos de administrar la bonanza. El PRI tenía una situación holgada. Con alcalde, regidores, funcionarios municipales, diputados locales y diputado federal, la situación económica estaba resuelta mediante el pago proporcional al salario.

Hoy la historia es diferente. El PRI está limitado a dos posiciones en el Cabildo, una de estas la ostenta el propio Héctor Silva y desde el año pasado no aporta nada para su partido.

Hay que recordar que en la reciente campaña, el regidor y ex presidente del Comité Municipal se sumó públicamente a MORENA.

En el cuerpo edilicio se ha comportado más morenista que priista lo que le valió colocar a su hijo en una posición laboral en la Junta de Aguas y Drenaje. Ahí los salarios son hartamente sustanciosos y su deslinde prianista garantiza la permanencia de su vástago ante el próximo relevo municipal.

Los Silva están de regreso. Ambos podrían colarse a la futura estructura del Gobierno local. Por lo pronto, el ex alcalde se perfila a convertirse en asesor y su hermano cuate ya amarró puesto.

Mientras tanto, en Ciudad Madero este lunes inició el proceso de entrega recepción con el primer encuentro formal entre Adrián Oseguera y Erasmo González.

El alcalde y el alcalde electo confirmaron un contexto de cordialidad y colaboración en la revisión de los bienes municipales.

El municipio que alberga la Playa más bella y visitada del estado está consolidado como bastión morenista de la zona conurbada. Lleva tres elecciones victoriosas.

El arribo de Erasmo González a la alcaldía a partir del 1 de Octubre, mantiene la expectativa de continuar por la ruta del progreso y el bienestar.

El ex diputado federal está listo; los proyectos de pavimentación y la construcción de drenes pluviales -dos de las prioridades- ya están gestionados y se espera sean contemplados en el presupuesto del 2025.

Oseguera y Erasmo confirmaron que no hay diferencias y que ahora, como diputado federal y como alcalde, respectivamente, prevalece la unidad para seguir trabajando por Madero.

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Maribel Villarreal

Periodista en Matamoros, Tamaulipas
Es jefa de información en WRadio