Al interior del Ayuntamiento de Matamoros hay problemas. La actitud del alcalde interino Rubén Sauceda Lumbreras ha ido de mal a peor. Literal, el médico neumólogo salió de su consultorio para asumir las riendas del municipio.

El edil no tiene tacto. Trae conflictos con los regidores, con los funcionarios y con la prensa. No le gustan las entrevistas, prefiere evitarlas. Tanta es su animadversión hacia los reporteros que amenazó de manera interna con desaparecer la Dirección de Comunicación Social.

Hace unos días se confrontó con el periodista Daniel Ochoa quien le cuestionaba en relación a los casos de COVID en la presidencia municipal y la cantidad de incapacidades vigentes y terminó diciéndole que si tuviera COVID ya habría bajado de peso.

Intentó destituir al secretario particular para poner en su lugar a su cuñado. De hecho, trascendió una lista de empleados municipales, -que iniciaron con el alcalde con licencia Mario López-, a los que les advirtió que serían “corridos”. Finalmente, no pudo hacerlo.

Los empleados más cercanos a la oficina del alcalde optaron por solicitar sus vacaciones porque los mantenía en la fría banca. No quería ni verlos.

De acuerdo a su ficha curricular, Sauceda Lumbreras está certificado en medicina interna y enfermedad pulmonar. Es especialista en cuidados de pacientes críticamente enfermos, pero, no ha tenido ninguna actividad en la función pública.

En este marco, ayer inició el proceso de entrega-recepción del Ayuntamiento. El equipo del alcalde electo Alberto Granados Favila está encabezado por Julio Hernández, segundo síndico del Cabildo y hombre cercano al futuro edil.

Aunque el relevo emana del mismo partido político, las diferencias públicas de La Borrega con Beto mantienen la expectativa de una transición no tan tersa.

La posibilidad aumenta por la inclusión de algunos personajes que en el pasado reciente se confrontaron con el hoy diputado federal electo.

En Tampico ayer tuvo lugar la primera reunión del alcalde Chucho Nader con la alcaldesa de electa Mónica Villarreal para acordar los mecanismos del proceso de entrega recepción.

Ambos declararon por separado que esperan una transición de altura.

A diferencia de Matamoros, en Tampico el relevo surge entre partidos diferentes, pero, -según se ve-, en plena calma y transparencia.

Chucho Nader se dispone a asumir como diputado federal el próximo 1 de septiembre, aunque posteriormente podría regresar y presentar su Tercer y último informe de Gobierno. En realidad, el sexto informe.

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Maribel Villarreal

Periodista en Matamoros, Tamaulipas
Es jefa de información en WRadio