El primer párrafo sirve para explicar de qué vamos a hablar, es decir, se plantea la idea o tema de lo que se va a desarrollar, por eso es importante que antes de ponerla por escrito debamos tenerla bien clara en nuestra mente. He leído algunos ensayos donde el autor explica al inicio del primer párrafo cómo va a desarrollar el tema.

La idea es más o menos la siguiente: “Trataré de explicar en la primera parte esto, en la segunda esto otro, para luego finalizar con…”. Cuando el autor termina la primera exposición, ya en la segunda parte nos recuerda algo así: “Ahora intentaré desarrollar…”. Estas palabras nos hacen recordar la estructura básica: introducción, desarrollo y final.

Es como si dijéramos: voy a explicar en el primer párrafo la introducción; en el segundo, tercero y cuarto su desarrollo y, en el quinto, las conclusiones. De esa manera podemos suponer cuál será la ruta que va a seguir el autor, ahora lo que nos hará falta es saber cómo empieza.

Hemos dicho que en el primer párrafo se plantea la idea o el tema a desarrollar, esta primera parte en el desarrollo del texto es de vital importancia para lo que se dirá más adelante. Conviene que le prestemos toda la atención posible, porque después los demás párrafos podrían verse afectados, hasta llegar incluso a eliminarse por completo, incluyendo el primero de ellos.

Como ejemplo se me viene a la mente el comienzo de un cuento infantil: “Había una vez…” ¿Qué pasaría si no entendemos lo que se dice en el primer párrafo de un cuento? Ahí podemos saber si se trata de una princesa o de una bruja, de un conejo o de un monstruo.

Considero que en todo texto el primer párrafo debe marcar la pauta a seguir, es la guía de los demás, por eso se debe reflexionar lo necesario y escribir nada más lo indispensable.

He hablado de una conexión, me refiero a que el primer párrafo debe conectarse sólidamente con el segundo párrafo y de ahí en adelante, cuando no es así se cae la estructura del texto, porque los párrafos no fueron escritos con la suficiente claridad.

Si en el primer párrafo se plantean varias ideas a la vez lo que puede suceder es que el autor no alcance a explicar todas, o se le olvide hacerlo. Hay autores que nos anticipan en el primer párrafo cómo va a desarrollar el tema. En esos casos ya sabemos que así puedan ser varios temas diferentes en cinco páginas lo importante fue lo que se dijo desde el primer párrafo, que se van a desarrollar por partes. Pero si en una página, por ejemplo, se plantean varias ideas y solo se alcanza a desarrollar muy poco de cada una, lo más probable es que nos quedemos con las ganas de saber más.

En cambio, si se plantean una o dos como mínimo, entonces habrá suficiente espacio de texto como para enterarnos de lo más importante. Considero que el problema de no expresar la idea con claridad consiste en que no la hemos madurado en nuestra mente, porque, así como en ocasiones pensamos en realizar una actividad como ir a correr por la mañana, ya por la noche nos estamos programando.

Cuando nos sentamos frente a la computadora dispuestos a escribir, en el primer párrafo ya debemos saber con anterioridad de qué vamos a hablar, porque primero se debe pensar lo suficiente, luego agarrarnos a escribir.

Debemos procurar siempre que el primer párrafo esté bien construido para que de ahí en adelante nos podamos soltar escribiendo, que vaya fluyendo la idea poco a poco, a su propio ritmo.

Ricardo Hernández Hernández
Poeta y columnista

Colaborador del portal:” Hoy Tamaulipas” hasta la fecha.
Actualmente estoy cursando un “Diplomado en Creación literaria” en la Biblioteca del Centro Cultural Tamaulipas, con el maestro José Luis Velarde.