Tampico, Tamaulipas. - El fuerte temporal que azotó el sur de Tamaulipas y la probable existencia de fugas en el dique del Estero de El Camalote, además de la constante apertura de las dos principales esclusas de la barrera de mampostería hicieron caer el nivel de la escala hidrométrica del Sistema Lagunario del río Tamesí-Chairel a 16.5 centímetros.

El director de la Casa de la Naturaleza de Tampico José Luis León Hurtado, dijo que la situación que viene a empeorar el panorama de abasto de agua para los habitantes, comercios e industrias.

Agregó que los fuertes vientos del norte que trajo el frente frío número 39 incidieron de forma sensible en el desplome del nivel de las lagunas de captación, haciendo caer la escala hidrométrica tres centímetros en tan corto tiempo, panorama más que complicado porque ubica a los usuarios a diez centímetros de la barrera crítica que se tuvo en 2021, cuando al ubicarse en cinco centímetros hubo intrusión salina.

Indicó que esto obliga además a la jefatura de sector, la Comisión Nacional del Agua, a redoblar la vigilancia tanto en los diques para que no haya fuga de agua dulce, así también para que disponga de vigilancia de la Guardia Nacional en estos sectores donde se encuentran las dos esclusas del dique del Estero El Camalote, que regularmente son abiertas para el paso de embarcaciones de pesca, pero que provocan que exista escape de agua dulce.

De esta manera, advirtió, la Conagua debe disponer de unos ocho elementos por turno, para que durante las 24 horas exista supervisión constante de las compuertas, para que mientras está la crisis hídrica no sean abiertas por ningún motivo, es decir, a partir de ahora quedaría vedado el paso de las lanchas de pescadores.

En esto mismo, insistió, la Conagua debe supervisar que no existan fugas de agua dulce de la represa, porque llama la atención que en ocho horas haya descendido la escala hidrométrica de 19 centímetros a 16.5, incidiendo en esta problemática como se apunta el viento del norte y estas probables fugas, porque el dique es muy antiguo.

Con todo esto, precisó, el sistema lagunario del sur de Tamaulipas está a diez centímetros de volver a alcanzar el nivel crítico histórico de cinco centímetros, observado en mayo de 2021, cuando la fuerza del mar ingresó al vaso de captación, sufriendo los habitantes, los comercios y los industriales el abasto de agua salada durante varias semanas, justamente porque el nivel del mar era más alto que el Sistema Lagunario del río Tamesí-Chairel, y además porque las compuertas del dique siempre estuvieron abiertas, sin vigilancia federal.

"Si las compuertas están mal selladas, pues se va el agua, por eso se necesita que la Conagua como cabeza de sector esté controlando las compuertas, toda la infraestructura hidráulica depende de la CNA, debe vigilar, las esclusas se abren, se cierran, deben estar cerradas por lo menos en esta temporada, cerradas, no hay paso, pero si se siguen abriendo en determinadas horas o las 24 horas, nadie sabe lo que está pasando allá; la Conagua debe disponer de vigilancia de la Guardia Nacional, urge que los industriales estén en esto también, que estén presionando para que el agua dulce esté garantizada", puntualizó el ambientalista.

El director de la Casa de la Naturaleza de Tampico, José Luis León Hurtado