Matamoros, Tamaulipas. - Un grupo de personas cruzó en horas de la madrugada el río Bravo hacia la vecina ciudad de Brownsville, Texas, quedando varados por horas al no poder cruzar las barricadas que han instalado las autoridades del vecino país para frenar esta inmigración.

Desde las tres de la mañana algunas personas cruzaron y hasta las 3 de la tarde continuaban varadas en la orilla del río en el lado americano sin poder tocar suelo norteamericano, provocando la desesperación.

En dos lugares diferentes se pudo apreciar la presencia de decenas de personas que estaban debajo de la cerca de más de dos metros de metal y cables con navajas sin poder cruzar, incluso algunos niños muy apenas se veían entre el cableado que colocaron las autoridades migratorias.

Gritaban que tenían hambre, sed, que los niños estaban enfermos al meterse al agua fría y estar aguantando el frío que se dejó sentir durante horas de la madrugada, pidiendo ayuda la cual las autoridades migratorias del lado mexicano no dejaron que les llegara.

Los migrantes mediante gritos denunciaron que se acercaron algunos paisanos y otros mexicanos a tratar de ayudarlos, llevándoles agua y comida, pero las autoridades de migración del lado mexicano no dejaron que se las hicieran llegar.

Por lo que hasta pasadas las 4 de la tarde estas personas seguían varadas en el lado americano a la orilla del río sin poder subir a tierras estadounidenses.