PRIMERA HISTORIA

Al calor de las elecciones municipales del 2010, cuando el mandamás era Eugenio Hernández Flores, se dio un fuerte choque con Ramón Garza Barrios, quien en ese entonces era el amo y señor de Nuevo Laredo.

Eugenio intentaba imponer como candidato a alcalde a su gallo Carlos Montiel Saeb, mientras que Ramón no cedía porque quería que fuera su primo político Héctor Canales González, quien en ese momento era el tesorero municipal.

Aunque el ahora exgobernador tenía el poder para imponerse, se topó con pared al escuchar de Garza Barrios que él no apoyaría a su gallo.

En el estire y afloje, se decidió por una medida radical. El candidato sería mi querido Benjamín Galván quien en esos momentos estaba posicionado en la ciudad por el trabajo realizado en la Cruz Roja.

Y se acabó el problema. Los otros dos jamás lograron ser candidatos. Se les acabó el corrido.

SEGUNDA HISTORIA

En la Hermana República de Abasolo, cada que había procesos internos para sacar candidato y se “buscaba la unidad”, todos los suspirantes a abanderar al PRI (el poderoso partido, que hoy está partido), todos decía que sí a la “unidad”, siempre y cuando fueran ellos quien abanderaran al Tricolor.

Lo que ocurría es que cuando se definía al “gallo”, los contrarios le jugaban las contras, pese a que se repartían entre ellos regidurías y puestos estatales. Se le iban en contra y en muchas ocasiones los resultados eran difíciles para el “candidato oficial”.

MAPA DE RIESGOS

El “Síndrome abasolense” se da en todos lados. No es algo exclusivo para un pequeño municipio. La fuerte pugna entre los grupos políticos es más fuerte en estos momentos en Tamaulipas. Los agravios entre distintos bandos ya son notorios. El problema real es que, de dejarlos avanzar, entre ellos mismos se harán daño.

Es tanto el “odio” que se respira entre las tribus políticas, especialmente, entre los morenistas, que seguramente, muchos ya están pensando en provocar el voto cruzado. El otro gran problema, es que mientras que unos no van a votar por los otros, esos otros están pensando exactamente lo mismo.

¿En donde se nota más la discordia? Lo podemos notar ampliamente en Ciudad Madero, Ciudad Victoria y Matamoros. Entre los grupos políticos más poderosos se están dando hasta con la cubeta.

Por ejemplo, en Matamoros es sabido el “odio jarocho” entre el alcalde Mario “La Borrega” López y la secretaria de Finanzas, Adriana Lozano. El pleito ha trascendido y es más que evidente.

López quiere imponer a como dé lugar a su pupilo Carlos Ballesteros Gálvez, mientras que Lozano está impulsando al diputado Alberto Granados Favila.

Ninguno de los dos grupos quiere ceder y por debajo de la mesa un día se ponen un madrazo y el otro también.

MEDIDAS SALOMÓNICAS

Ante la soberbia desmedida entre los morenistas y ante el riesgo que pudiera avanzar el Frente Amplio, el gobernador Américo Villarreal deberá de dar un manotazo en la mesa y de no recibir respuesta satisfactoria, tendrá que ir viendo nuevos cuadros y mandar a sus casas a los revoltosos.

Un tercero en discordia sería la mejor opción y así muchos le empezarían a tantear el agua a los camotes.

A nivel nacional ya se está viendo estos escenarios. La ruptura al interior de Morena por los espacios de poder son más que evidentes. De no tomar medidas drásticas, así cuenten con el apoyo popular, seguramente estarán preparando su derrota. Si no, para el baile vamos.

La pregunta es directa:

¿Serán capaces los grupos de poder en Matamoros, Ciudad Madero y Ciudad Victoria en pavimentar hacia una transición tranquila y sin problemas? ¿Estarán preparados para que los manden a sus casas?

Digo, en estos momentos pese a las señales de dificultad, Morena sigue siendo la marca con mayor preferencia y si en Victoria pusieran como candidato a “Juan Perros”, y en Matamoros la terna fuera entre “El Babas” y “El Memelo” ¡no dude que ganarían y de calle!

ESTO NO TIENE NADA QUÉ VER CON LA NAVIDAD

En México no existe una cultura sobre los seguros de vida, muchos no creen en ellos o sencillo, no han tenido oportunidad de conocerlos. Si eres uno de este grupo, permíteme comentarte que:

Un seguro de vida no es solo una inversión financiera, es una expresión de amor y responsabilidad hacia tus seres queridos. Imagina que, en un futuro incierto, algo te ocurriera. El seguro de vida sería un respaldo, una garantía de que tu familia podrá mantener su calidad de vida, pagar las deudas y asegurar el futuro de tus hijos. Es una muestra de cuidado, un gesto que proporciona seguridad en tiempos de vulnerabilidad. Es un regalo emocional que te permite cuidar de los tuyos incluso cuando no estés físicamente presente. Piensa en ello como un legado de amor y protección.

Si te interesa, me encantaría reunirme contigo y ayudarte a blindar lo que más te importa.

Marco Esquivel

Valle Hermoso, Tamaulipas 1973
Periodista, Agente de Seguros y Consultor Político

Tiene una maestría en Gobierno y Política Pública; un Máster en Gestión de Riesgos por la Ealde Business School.
En 2015 concluyó un Máster en Asesoramiento de Imagen y Consultoría Política por la Universidad Camilo José Cela (Madrid, España)
Es director general del periódico digital HOYTamaulipas.
Su columna Esto se Dice se ha publicado en distintos medios de comunicación de Tamaulipas.

Como agente de Seguros, cuenta con cédula A, B y D, para intermediar seguros personales, empresariales y agrícola y ganado. Es miembro de la Million Dollar Round Table que congrega a los mejores agentes de seguros internacionalmente. Durante el 2024 terminó su certificación en seguros de vida en The American College of Financial Services.