Ciudad Madero, Tamaulipas. - Tan pronto pudo, Monseñor José Armando Álvarez Cano, obispo de Tampico, llegó al punto de la tragedia. Frente a sus ojos estaba colapsada la Parroquia de la Santa Cruz, enclavada en el populoso sector de la Unidad Nacional.

Y empezó su misión.

Se fundió en un largo abrazo con el padre Ángel Vargas sacerdote de esa comunidad católica, quien no pudo contener las lágrimas y rompió en llanto.

En sus rostros se dibujaba la tragedia, que de acuerdo a fuentes no oficiales se ha saldado con al menos siete víctimas.

A las 14:00 horas con 18 minutos y 26 segundos quedó registrada la tragedia en un video de seguridad. El techo de la Santa Cruz colapsaba y caía contra decenas de católicos que habían ido a la misa de precepto.

El obispo don José Armando, identificado entre el mar de gentes por su solideo, recorrió el lugar y consoló a cuantos pudo.

Mientras tanto los cuerpos de socorro que se vieron rebasados por la tragedia, de pronto encontraron manos amigas, de la misma población y de otras corporaciones que hicieron acto de presencia.

Mientras avanza el tiempo, se espera el informe oficial sobre la tragedia.