Ciudad de México. - La trata de personas causa daño a niñas, niños y adolescentes que son las víctimas más vulnerables de este delito, señaló la encargada de despacho de la Secretaría Ejecutiva (SE) del Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (Sipinna), adscrita a la Secretaría de Gobernación, Constanza Tort San Román.

En la sesión permanente de la Comisión de Secretarías Ejecutivas de Protección Integral de los Sistemas Nacional y de las Entidades Federativas del Sipinna, se abordó el tema de prevención de actividades delictivas y trata de niñas, niños y adolescentes, donde Tort San Román comentó que este fenómeno se recrudece cuando personas menores de 18 años están en situación de vulnerabilidad por factores como pobreza, marginación, inseguridad y adicciones.

En el diálogo se expuso que las autoridades mantienen acciones activas para enfrentar la trata de personas en colaboración con las 32 SE estatales de los Sipinna, a fin de diseñar mecanismos de protección que eviten que este grupo se convierta en víctima de la delincuencia y pueda garantizarse su acompañamiento por la familia y la comunidad.

Durante el evento se hizo énfasis en la necesidad de establecer normas y fijar límites claros en el ambiente familiar, definir roles, mantener una comunicación asertiva, supervisar y cuidar debidamente a niñas, niños y adolescentes, brindándoles una red de apoyo en un ambiente de estabilidad económica.

También se dijo que instituciones de gobierno como las de seguridad, salud, educación y del Poder Judicial, entre otras, junto con las comunidades y organizaciones de la sociedad civil brindan servicios públicos y lugares seguros donde esta población etaria pueda realizar actividades recreativas de forma segura.

De igual forma se destacó que en el aspecto individual lo relevante para prevenir que se involucren en actividades delictivas hay que hablar con claridad a niñas, niños y adolescentes, fortalecer sus emociones, proteger su identidad, así como impulsar la autoestima, el apego a los estudios y el respeto a las figuras de autoridad.

Con estas acciones se le ofrece a este sector de la población calidad de vida y herramientas para vivir sin temor de sufrir violencia.

Las afectaciones que pueden llegar a tener niñas, niños y adolescentes sometidos a la violencia son:

-Físicas (lesiones, desapariciones, mutilaciones, homicidios).

-Psicológicas (ansiedad, pensamientos suicidas, consumo de sustancias).

-Social (discriminación, separación familiar, abandono escolar).

-Institucional (falta de acceso a servicios básicos como la educación y la salud).