Ciudad Victoria, Tamaulipas. - La educación no es un privilegio, es un derecho y en la actualidad es casi imposible negar la gran importancia que tiene en la vida de una persona y en el desarrollo de un país, manifestó el director general del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) en Tamaulipas, Geancarlo Bonetta Cavazos.

“A nivel individual es necesaria para propiciar la movilidad social, el acceso a mejores oportunidades laborales y el desarrollo de capacidades y la autonomía, un país que garantiza que sus ciudadanos tengan acceso a la educación da pie a mejores niveles de bienestar social y crecimiento económico; además de nivelar desigualdades económicas y sociales.”

Partiendo de este contexto, el funcionario estatal precisó que;

“En Tamaulipas hay una eficiencia terminal en Primaria, pues cerca del 97 por ciento de los niños la terminan, pero el problema de deserción inicia a partir del nivel Secundaria y más en la educación media superior y se debe a múltiples factores, desde el desinterés hasta la falta de recursos.”

Por eso, subrayó que el Sistema DIF Tamaulipas reactivó las becas escolares para la población vulnerable, “precisamente para darles las herramientas básicas a los niños y jóvenes y puedan culminar su educación básica”.

Destacó que a través de las becas “Esperanza de Tamaulipas” y “Por la Inclusión Social en Tamaulipas”, el Sistema DIF garantiza el acceso y permanencia en el sistema educativo y contribuye a disminuir la deserción escolar.

“El gobernador Américo Villarreal Anaya reafirma su voluntad de apoyar a la educación, a la economía de las familias y el bienestar de la niñez y juventud tamaulipecas, a través de este tipo de instrumentos que impulsan y promueven el trabajo en equipo y por el esfuerzo compartido en la transformación del estado para hacer de la entidad un mejor lugar para vivir”, precisó.

Bonetta Cavazos comentó que con la reciente entrega de las primeras mil 800 becas, de los programas “Esperanza de Tamaulipas” y “Por la Inclusión Social en Tamaulipas”, se apoya a grupos vulnerables de niñas, niños y adolescentes en riesgo de trabajo infantil, así como a menores de edad en condiciones difíciles, que son canalizados a través de la Procuraduría de Protección de Niñas, Niños, Adolescentes y Familias y de la Comisión Estatal de Atención a Víctimas.

Además, se beneficia a estudiantes con alguna discapacidad que acuden al Centro de Rehabilitación y Educación Especial (CREE), al Centro de Autismo y del Programa Lazos de Esperanza que impulsa la presidenta del DIF Estatal en los 43 municipios de la entidad.