Reynosa, Tamaulipas - Javier, un hombre de 44 años de edad jamás imaginó que en vida sería trasladado en carroza funeraria luego de sufrir un accidente en Reynosa.

Todo comenzó cuando se encontraba realizando trabajos de plomería, en un segundo piso de una casa ubicada en el fraccionamiento Terranova de este municipio fronterizo.

Al verlo tirado en el piso, sus vecinos y conocidos llamaron a los cuerpos de auxilio como ambulancia y Protección Civil que nunca llegaron.

Al ver la condición de Javier, quien se quejaba de fuertes dolores por el golpe a consecuencia de la caída, uno de sus vecinos, David, que trabaja en una empresa funeraria, se ofreció a trasladarlo a un hospital, en una carroza.

Entre todos los vecinos lo levantaron, lo subieron a la carroza de la funeraria “El Maestro”, en donde trabaja David, el conductor.

Y en el interior de la carroza primero fueron a un centro médico donde no lo pudieron atender porque carecían de aparatos para hacer radiografías para conocer su estado de salud.

Luego lo llevaron al Hospital General en donde lo atendieron para sanar sus golpes y así fue como Javier podrá contar que viajó en una carroza, pero no hasta su última morada.