Nuevo Laredo, Tamaulipas.— Una empresa de reciclaje de cartón y al menos 15 cajas de tráiler que servían como lugar de almacenamiento, quedaron destruidas totalmente al registrarse un poderoso incendio en el lugar por causas aún desconocidas por los cuerpos de emergencia.

Poco antes de las 2:00 de la tarde, se reportó el incendio de dicho negocio ubicado en la cuadra 700 de la calle Praxedis López Ramos, entre las colonias La Paz y Los Aztecas, al sur de Nuevo Laredo.

Varias unidades de ataque rápido y apagadoras fueron enviadas al lugar, al llegar los Bomberos notaron que el fuego era muy superior a ellos.

Los elementos aguardaban en el lugar y protegían parte de un yonke y una vivienda contigua al lugar, para evitar que el fuego o la radiación causara daños en sus instalaciones.

Otro grupo de bomberos fue enviado a espaldas de la recicladora para trabajar y evitar que las llamaradas alcanzaran parte de un complejo deportivo.

Frente a la recicladora se localiza un enorme predio que sirve como almacenamiento de cartón y en este se encontraban al menos 15 cajas tráiler que también fueron presa fácil del incendio.

La densa nube de humo se podía apreciar desde cualquier rincón de Nuevo Laredo, y el fuego alcanzó fácilmente los cuatro metros de altura.

Personal de Tránsito cerró la circulación en el sector para evitar que automovilistas se acercaran a tomar fotografías en el lugar como si se tratara de un espectáculo.

Mientras eso ocurría, personal de Protección Civil y Bomberos evacuaron a los trabajadores de las empresas cercanas, una dedicada a la distribución de frituras y un yonke.

De este último lugar, su personal fue visto tratando de salvar algunos de los vehículos que se tenían, algunos si encendían, pero otros no, por lo que tuvieron que sacarlos empujando.

Algunos empleados de la empresa de frituras que andaban en ruta tuvieron que regresar a las instalaciones para retirar sus vehículos, ya que se temía que el fuego los alcanzara.

El fuego dañó postes de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), por un momento se corrió el riesgo de que los cables de alta tensión se vinieran abajo y causaran daño aún electrificados.

Sin embargo; el personal de CFE llegó a los pocos minutos y suspendió el servicio.

Hasta las seis de la tarde, personal de emergencias seguía trabajando en el lugar lanzando agua en los alrededores para tratar de apagar el fuego y evitar que siguiera avanzando.

Las causas que originaron el incendio eran desconocidas para los cuerpos de emergencia, y los daños materiales eran todavía incalculables.