Matamoros, Tamaulipas. - El presidente municipal Mario Alberto López Hernández, confirmó que, de ser necesario, en el Centro Integrador del Migrante (CIM) se estaría creando un campamento para la población venezolana y otros países, que están deportando entre las ciudades de Brownsville, Texas y Matamoros, Tamaulipas.

Explicó que actualmente en dicho inmueble se tiene a 600 personas de diferentes nacionalidades, teniendo una capacidad de por lo menos mil, pero al tener un espacio amplio, en caso de que haya la llegada de más comunidad, se estaría generando la infraestructura necesaria para atender a los migrantes.

Recordó que no todos se están quedando en la ciudad, algunos están optando por irse al interior del país a la ciudad de México, a donde los lleva el Instituto Nacional de Migración (INM).

Aseguró que la mayor movilidad que se está presentando en cuanto a migración es por la ciudad de Reynosa, por Matamoros son pocos los que están siendo expulsados por parte de las autoridades de Estados Unidos.

Comentó que luego de los hechos que se presentaron el pasado viernes donde se cerró el Puente Nuevo, se dialogó con los venezolanos, algunos se regresaron y otros se quedaron en la ciudad, quienes fueron albergados en el CIM.

Agregó que en lo que respecta al municipio, solo se están ofreciendo los servicios básicos al CIM, mientras que el resto de los gastos corre a cargo del mismo gobierno federal, quienes tienen a cargo dicha infraestructura.