Nuevo Laredo, Tamaulipas. - El director del Centro de Estudios del río Bravo, Gustavo Pantoja, indicó que debido a que el mes de mayo no fue lo que se esperaba en precipitaciones, esperan que llueva a principios de septiembre, como es usual en la región.

Explicó que el consumo para la población está asegurado por parte de Conagua y no se contempla una crisis como en Nuevo León, pero dijo que es necesario que haya precipitaciones en la región para mitigar los efectos del clima adverso que supera los 40 grados centígrados.

“Tengo entendido que la Conagua en el tema de riego sí están autorizando parte de utilizar el recurso, esperemos las precipitaciones pluviales, si bien es cierto mayo no fue lo que esperábamos en ese tema, vamos a ver si en cierre de agosto y principios de septiembre llegan las lluvias”, indicó Pantoja.

Dijo que los principales afectados son los productores del campo, que no han recibido agua para sus pastizales y en sus abrevaderos.

“Mientras no existan precipitaciones los ganaderos van a estar batallando, el sistema que depende directamente de este recurso, esperamos que las nubes que están bombardeando en Nuevo León vengan para acá”, dijo.

El Estado de Nuevo León ha bombardeado las nubes en su entidad, con el objetivo de mitigar la crisis que se vive por la falta de lluvias y la carencia de agua en sus presas.