Los Ángeles. – El formato de videos cortos está en la mira de creadores de contenido musical que han entendido que el uso de diversas plataformas puede incidir directamente en el aumento de reproducciones de canciones en aplicaciones de streaming, según diferentes estudios.

En la última década se han desarrollado diversas plataformas de contenido digital, lo que ha generado que los nativos digitales convivan en ellas, pero a su vez migren de una a otra.

Por ejemplo, es común que un usuario comparta sus perfiles en Instagram, YouTube y la más reciente TikTok, dejando de lado a las pioneras, Twitter y Facebook.

Una revelación hecha por el TikTok Marketing Sciences, en colaboración con Insites Consulting, presenta que “Después de escuchar música nueva, casi la mitad de las personas en TikTok añaden la canción a sus favoritos (47%).

El 46 por ciento ven el perfil del artista (46%) “e incluso siguen al artista en TikTok (43%), y esto a su vez ha desencadenado una ola masiva de descubrimiento de nuevos artistas”.

Los perfiles de aquellos que generan contenidos musicales, con frecuencia resultan tener un crecimiento óptimo, sin embargo, se enfrentan a otro tipo de contenido viral dejando así una tarea adicional; además de crear sus producciones deben trabajar en fortalecer sus comunidades en redes sociales.

El panorama actual volcó a los creadores de contenido a la generación de videos.

Según Cisco, compañía de tecnología de comunicaciones, para 2022 más del 82% del tráfico global en línea estará representado por contenido de video, 15 veces más que en 2017.

El consumo que más se ha disparado es el de videos cortos. Al respecto, Google cuenta que los jóvenes de la Generación Z prefieren videos cortos, pues entre más jóvenes son las audiencias, menos tiempo de atención tienen, argumenta su estudio.

Lo que deja entonces un alto nivel de competencia por la atención de las audiencias más jóvenes en plataformas donde el mínimo de video es de 15 segundos.

El director de marketing de Cinq Music para Latinoamérica, Hugo Moreno, reconoce que este tiempo es corto, pero aun así afirma: “diría que 15 a 30 segundos es el tiempo más popular para hacer videos, es importante captar la atención del público en los primeros segundos. En el caso de las canciones lo recomendado es tomar un fragmento relevante, llamativo, un buen beat para iniciar”.

Aunque la industria musical ha sido una de las que más ha tenido que cambiar para ceñirse a los nuevos patrones de consumo en redes sociales, también ha visto cómo estos nuevos formatos no solo han catapultado nuevos talentos, sino que además han revitalizado canciones del pasado.

Uno de los casos destacados fue el sencillo “Muy Feliz” del artista puertorriqueño Ñejo, quien trabajó en esta producción en 2020, pero la explosión dentro de TikTok e Instagram se dio casi un año después, luego que un influenciador usó esta canción para ambientar su contenido y luego se convirtiera en un reto viral: #MuyFelizChallenge.

Esta exposición de su tema le representó al artista estar en los primeros lugares de rotación en emisoras de diferentes países en Latinoamérica, además de sumar más de 12 millones de vistas en su video oficial y que más influencers se sumaran al reto.

Los artistas dentro de la industria musical empiezan poco a poco a expandir sus roles dentro del mundo 2.0, además de producir sus canciones y demás, el mundo digital los ha convertido también en embajadores de marca, líderes de opinión y generadores de contenido exclusivo.

“Es importante que un artista no pierda el foco de su carrera, porque en un mundo donde un influenciador genera ingresos increíbles, es fácil desligarse de la música y dedicarse de lleno a las plataformas digitales”, subrayó Moreno.

El ejecutivo de Cinq Music resalta “la importancia de rodearse de un buen equipo de trabajo, que esté codo a codo con el cantante o el grupo, generando contenidos y estando siempre al margen de las últimas tendencias y de los manejos de posibles sponsors”.

Un buen equipo de trabajo fortalece el crecimiento de un artista en diferentes frentes, permitiendo que sus comunidades aumenten en términos de cantidad y calidad, siguiendo un plan continuo y elaborado para conseguir los objetivos en cada lanzamiento.