Chilpancingo, Guerrero. – Xóchitl Mestre Rosas, responsable de la Prevención de Atención a la Violencia de la Jurisdicción Sanitaria 03, informó que la violencia sexual aumentó durante el confinamiento por la pandemia por COVID-19, y parcialmente en menores de edad.

Agregó que con base en las cifras de la Secretaría de Salud Guerrero, durante los últimos dos años de la pandemia por Covid-19, las cifras de atención aumentaron de manera considerable.

La funcionaria encabezó la inauguración de la unidad de Servicio Especializado de Prevención y Atención a la Violencia (Sepavi), el programa tiene como objetivo enfocarse a la atención a mujeres de 15 años en adelante en pareja, aunque está preparado con especialistas, para la atender a niñas.

“Brindamos atención de emergencia para canalizarlas a través de redes de apoyo institucional. A la Secretaría de Salud nos toca la atención médica y psicológica”.

Explicó que, durante los últimos dos años la incidencia de violencia sexual alcanzó un 34 por ciento, comparativamente con otros períodos, y los municipios de Chilpancingo y Acapulco, por su densidad poblacional, registran las cifras más altas.

Mestre Rosas informó que se brinda atención integral a las mujeres violentadas, preferentemente en la Unidad de Partería, instancia que cuenta con un grupo multidisciplinario que incluye trabajo social, psicología, atención médica y personal de enfermería.

Dijo que, la Norma 046 maneja 5 tipos de violencia: física, sexual, psicológica, económica y abandono. En mayoría está la violencia psicológica, seguida de la física y se ha incrementado la sexual. “En Guerrero tenemos el 27.8 por ciento de proporción de mujeres en situación de violencia con respecto a las personas que acuden a consulta”.