Tampico, Tamaulipas.- La coordinación General de Protección Civil en Tamaulipas está lanzando la orientación a quienes acuden a realizar campismo que hagan buen uso de las fogatas, las cuales deben ser mitigadas totalmente antes de retirarse del bosque, declaró el titular del organismo, Pedro Granados Ramírez.

En este contexto, también se refirió a las quemas de basuras y de desmonte que de igual manera generan una problemática de incendios de pastizales, que más adelante será muy complicado controlar por lo alejado de las cabeceras municipales.

Indicó que es este tiempo con la incidencia de vientos fuertes del norte y de suradas que las fogatas se reaniman, provocando los incendios con lo que las zonas forestales se ven impactadas negativamente, adicional a las quemas que se programan para desmonte, reduciéndose las áreas boscosas por tal causa.

Incluso se refirió hasta a las colillas de cigarrillos que arrojan choferes o automovilistas desde sus unidades con las que se inician estos accidentes.

"Los vientos activan o favorecen la cuestión de incendios forestales que tenemos varios, aunque más que forestales son pastizales y los incendios agropecuarios que nos están requiriendo bastante esfuerzo a todas las corporaciones, pues es en lo que hemos venido trabajando", precisó.

"Lo que hemos estado pidiendo mucho es cuidar el tema de las fogatas mal apagadas, de las quemas de basura que se salen de control, las quemas para desmonte, que también ejidatarios por ahí andan haciendo o rancheros, etcétera, y pues se les va de control y eso nos ha perjudicado bastante con los incendios forestales, colillas de cigarrillos y cosas de ese tipo, porque ahorita no hemos tenido actividad eléctrica atmosférica como para atribuir los incendios a causas naturales", completó.

Con esto, estimó que los incendios están siendo provocados por causas humanas, siendo ellas entre un 40 a un 45 por ciento del total de los incendios forestales al año en Tamaulipas, en tanto que el resto son por motivos naturales, registrando hasta ahora dos fuertes quemas, una en el municipio de Bustamante, afectando unas 12 hectáreas, y otra más en Gómez Farías, consumiendo 40 hectáreas de material de hojarasca y matorrales.