Cuernavaca, Morelos. - El secretario de Gobierno de Morelos, Pablo Ojeda Cárdenas aseguró que la crisis y el enfrentamiento entre grupos que prevalece en el Congreso del estado de Morelos, sólo podrá resolverse cuando se respeten los derechos políticos de los legisladores que integran el bloque Morena-PT-PES-RSP a los que, desde diciembre pasado, se les retiraron sueldos, prerrogativas, apoyos y su personal fue despedido sin motivo alguno.

Ojeda Cárdenas, afirmó que el presidente de la Mesa Directiva del Congreso del estado de Morelos, el panista Francisco Sánchez Zavala tiene las facultades pero también las obligaciones políticas de conducir al Poder Legislativo y a los diputados aun entendimiento que termine con el choque entre legisladores y la parálisis en que han derivado los enfrentamientos.

Desde el pasado 12 de diciembre, el Congreso del estado está dividido en dos bloques: el G8 conformado por Morena-PT-PES-RSP y el G11 integrado por el PAN-PRI-NA-MC, cuyos integrantes “acordaron” cerrar todo recurso económico a sus compañeros, despedir a sus trabajadores y, también, quitarles todas las presidencias de las que formaban parte.

En entrevista, el responsable de la política interna del estado de Morelos, reconoció que si bien es cierto el presidente del Congreso, Sánchez Zavala ha expresado su deseo de retornar a la civilidad en el Poder Legislativo, también lo es que no se generan las condiciones de confianza y credibilidad, mucho menos las que garanticen el cumplimiento de la ley, y el  respeto a los derechos políticos de las diputadas afectadas.

Finalmente reconoció que este fin de semana, el gobernador Cuauhtémoc Blanco sostuvo un rápido encuentro con el presidente de3l Legislativo, e intercambiaron puntos de vista, entre ellos el deseo de Sánchez Zavala de devolverle al Congreso la legitimidad y los acuerdos, lo cual, aún no se cumple.