Ayer por la mañana nos enteramos que tembló cerquita de la capital tamaulipeca, que el movimiento telúrico ocurrió alrededor de las 2 de la mañana, pero la mayoría de la población ni lo sintió. 

Y es que, a esa hora, las 2 de la mañana, solo los desvelados y los enfiestados quizá podían percatarse, pero es un hecho que era menos probable que quienes andaban de fiesta lo sintieran, en la madrugada y con un poco de alcohol seguro traían sus propios temblores. 

Pero bueno, la situación es que el Sistema Sismológico Nacional registró un sismo de 4.1 en la escala de Richter y a 57 kilómetros de la capital tamaulipeca que, insisto, la mayoría de los victorenses ni cuenta se dieron, dormidos o enfiestados, menos. 

Y es que la verdad ese temblor, Gracias a DIOS, no se sintió ni asusto, como los estremecimientos que a diario siente la población, pues lo que tiene a la gente temblando en estos tiempos es que aún no se recupera de los estragos provocados por el COVID-19, y por si eso fuera poco ya anunciaron la llegada de OMICON, una cepa más agresiva, resistente y que aún no saben con que la controlaran, eso sí asusta y estremece. 

Otra situación que también tiene a la gente temblando es que se está en vísperas navideñas y muchas familias, por falta de empleo o que quedaron endeudados por el COVID no les alcanzará para regalos a sus familias comprar, bueno, en muchos hogares ni siquiera se tendrá una cena navideña para la llegada del niño JESUS celebrar y eso si estremece. 

Pero como dijera aquella vieja canción interpretada por CHICO CHE y la Crisis ¿dónde te agarró el temblor?  

Seguramente la contestación será que en todas partes, porque el temblor por la crisis se siente en todos lados y a cada momento, no hay quien no tiemble al pensar en la carestía de la vida por la falta de empleo, altos consumos de energía eléctrica, el COVID, la inseguridad y la incertidumbre de lo que pasara mañana. 

Del sismo, aunque no deja de ser algo que antes parecía insólito y que hoy se registran con mayor frecuencia por estas tierras aunque no es un lugar sísmico, poca fue la preocupación porque la verdad no pasa ni pasará a mayores. 

Mayor es el temblor que se sienten muchas familias para enfrentar su día a día, más en estas fechas decembrinas y poca certidumbre financiera. 

En fin, la situación es que nuevamente se registra actividad sísmica en Tamaulipas, atípico sí, pero sin mayores complicaciones porque gracias a DIOS ni se sintió. 

Rosa Elena González

Es Licenciada en Relaciones Públicas. Ha colaborado con editoriales en El Mercurio.
Actualmente su columna Vida Diaria se publica en el Portal HOYTamaulipas y los periódicos La Verdad de Tamaulipas, Expreso, La Extra, La Voz de Tula, El Tiempo de Mante y Astronoticias, El Bravo de Matamoros y Canal 10