Chilpancingo, Gro. - Trabajadores del Colegio de Bachilleres incorporados, marcharon por las avenidas de la ciudad, para exigir la asignación de un presupuesto de 60 millones de pesos para construcción de 14 planteles y la incorporación de 150 maestros al sistema formal, a fin de que puedan tener acceso a plazas con techo presupuestal propio.

Los inconformes llegaron hasta las instalaciones del Congreso local, y con pancartas en mano, exigieron a los diputados locales la aprobación de una partida presupuestal, en el marco de la aprobación del paquete económico del ejercicio fiscal 2022.

El recurso permitirá la regularización de 14 planteles incorporados, que funcionan desde hace más de 15 años, sin el apoyo gubernamental, sólo con las aportaciones voluntarias de los padres de familia; y en cuyas aulas son atendidos mil 300 estudiantes.

Claudio Ortega Menzoa, vocero de la Unión de Colegios de Bachilleres Incorporados, reclamó el trato desigual de los diputados del Congreso local y del Ejecutivo estatal a los subsistemas, debido a que las preparatorias populares cuentan ya con un techo presupuestal propio, por un monto de 60 millones de pesos.

Los docentes de los Colegios de Bachilleres Incorporados, que atienden a jóvenes en las zonas marginadas del estado, reciben mil 400 pesos al mes como salario, sin derechos, ni prestaciones, muchos ya están a la mitad de su jubilación.