Madrid, España, (Agencia Informativa de México).- Yunior García Aguilera, uno de los líderes en Cuba, de la plataforma Archipiélago, que convocaron a la Marcha del 15N para exigir un cambio que lleve a libertad de los Cubanos de la dictadura castrista, decidió abandonar la Isla e irse a España buscando refugio internacional.

“La única manera que yo tenía de evitar, que me silenciaran, era escapando de ellos”, justificó el propio García Aguilera, y acotó que “el régimen cubano se ha quitado la máscara, con su reacción furibunda contra todos aquellos que apoyaron las marchas pacíficas en demanda de libertad”.

“Llegamos a España, vivos, sanos y con las ideas intactas”, posteó en redes sociales el dramaturgo Yunior García y agregó que se quebró por “las horas sin dormir, el acoso, la falta de comunicación y las amenazas” que estaba viviendo en la Habana, desde que convoco a la Marcha 15N, además de que ya no podía hacer nada, porque su casa todo el tiempo estaba sitiada por agentes de la seguridad del Estado del Gobierno Encabezado por Miguel Díaz-Canel.

Por cuestiones de seguridad personal de líder cubano, no se ha revelado con exactitud su paradero, pero el corresponsal del diario español El País, Miguel González, informó que fuentes del Ministerio de Relaciones revelaron que Yunior García quien tomo “una decisión personal de él”, solicitó un visado y se le otorgó.

“Obviamente, las autoridades cubanas no se han opuesto porque, si no, no habría salido. De momento tiene un visado normal. No sabemos si querrá pedir asilo. Habrá que hablar con él para saber cuáles son sus planes”, señaló a fuente a el rotativo español.

Y es que, hace unas horas el dramaturgo había sido reportado, por la plataforma Archipiélago, como desaparecido, luego de que uno de sus compañeros acudiera a su casa y nadie respondiera a la puerta.

El domingo 14 de noviembre, Yunior García, había anunciado que saldría a protestar de manera pacífica y en solitario, pero desde entonces su domicilio fue cercado por elementos de seguridad que le impidieron salir a manifestares. Lo que buscaba el dramaturgo era que no hubiera represaliar, ni violencia durante la Marcha del 15 de Noviembre que se había convocado en varias ciudades y puntos de la Habana.

“Iban a dejarme encerrado en mi casa. Incomunicado. Me iban a desacreditar. Me iban a silenciar. Soy un creador y al silenciarme me iban a anular. Me querían mantener callado y la única manera de evitarlo era escapar. Ya sabía que lo iban a celebrar. Habrán gastado todas sus botellas de whisky. Ya he visto cómo se han burlado. Pero si me hubiesen callado, me mataban”, señaló García Aguilera, en una rueda de prensa que se trasmitió por YouTube.