El hecho que dos diputadas –de cinco que están en la mira- hayan abandonado a los partidos que las cobijó y las hizo ganar gracias a su marca en las urnas del pasado 6 de junio, para muchos, no era sorpresa. Tal pareciera que los únicos sorprendidos eran precisamente los líderes de Morena.

El pasado lunes preguntaba ¿Cuánto cuesta un diputado?; y era precisamente el análisis en relación a la disputa de diputaciones plurinominales que al final reconquistó el Partido Acción Nacional en los tribunales federales y que, de necesitar más diputados, el PAN haría lo que fuera para ampliar su poder en el Congreso Local.

Hay un chiste ligeramente grosero que asegura que todos los hombres son gay, el problema es llegar al precio. Y precisamente esto fue lo que ocurrió en el Congreso, no sé si hubo o no dinero de por medio, pero a las dos diputadas le llegaron al precio. Así sea, porque se sentían relegadas o no valoradas en sus fracciones.

El problema que veo, es la ingenuidad de los líderes morenistas. Desde el mismo 6 de junio debieron de hacer un análisis de riesgos para determinar si sus objetivos podrían verse comprometidos. A lo mejor actuaron de buena fe, a lo mejor son más buenos que el pan… el problema es que hay una línea muy delgada entre ser buena gente y (que el autocorrector ponga la palabra que más le guste).

Durante la semana, leí en varios lugares que en esa decisión de las dos diputadas hubo “truco”, en clara referencia al secretario General de Gobierno, César Verástegui Ostos y no dudo que su mano haya estado metida en este asunto y no lo dudo, porque es una chamba directa del ahora precandidato del PAN a la gubernatura del Estado.

Y ahora sí que valga la expresión “haiga sido como haiga sido”, hay una realidad, “El Truco”, dio resultados y dio a su partido la posibilidad de ponerle un freno a los morenistas que tomaron el Congreso local por asalto.

Claro, todavía falta tejer fino.

En el Congreso hay una realidad. Morena y el PT suman 18 votos, contra 15 del Partido Acción Nacional. Hay dos votos más que están en el PRI y otro más en Gustavo Cárdenas.

O sea, no sé si haya el dinero o arreglos suficientes para arrebatarle otro diputado más a Morena y además puedan conciliar con Edgar Melhem, Alejandra Cárdenas y el propio Gustavo Cárdenas para que el PAN tenga mayoría en el Poder Legislativo.

No sé de qué capacidades cuentan en el Tercer Piso; tampoco sé si esos tres votos vayan a ceder y se conviertan en la bisagra para el PAN, porque hay una terrible realidad:

El Partido Acción Nacional y los propios titiriteros no buscan aliados para la próxima elección de gobernador: quiere gatos.

Y entonces tengo que preguntar ¿Cuántos estarán aprendiendo a maullar en el PRI?

La otra realidad es que la política es para diablos, no para niños párvulos, esos que sueñan a la política, pero que todavía no son capaces de ir al baño solos. 

Espero que lo ocurrido en el Congreso local, les sirva de lección.

Comentarios: Twitter @Marco_Esquivel 

Marco Esquivel

Valle Hermoso, Tamaulipas 1973
Periodista, Agente de Seguros y Consultor Político

Tiene una maestría en Gobierno y Política Pública; un Máster en Gestión de Riesgos por la Ealde Business School.
En 2015 concluyó un Máster en Asesoramiento de Imagen y Consultoría Política por la Universidad Camilo José Cela (Madrid, España)
Es director general del periódico digital HOYTamaulipas.
Su columna Esto se Dice se ha publicado en distintos medios de comunicación de Tamaulipas.

Como agente de Seguros, cuenta con cédula A, B y D, para intermediar seguros personales, empresariales y agrícola y ganado. Es miembro de la Million Dollar Round Table que congrega a los mejores agentes de seguros internacionalmente. Durante el 2024 terminó su certificación en seguros de vida en The American College of Financial Services.