Se desató la encuestitis, presuntos estudios de todos los colores y sabores aparecen a diario en las redes sociales y medios de comunicación, en esas encuestas algunos personajes que desean convertirse en candidatos a Gobernador son el fiel reflejo su miseria, andan muy inflados, pero para su mala suerte su verdadero rating se ve de lejos, y de cerca más, por ello rápido se descubre el sondeo de opinión que está hecho a modo.  

Todos están utilizando, o mejor dicho, mal utilizando esa herramienta, se ven encuestas de aspirantes de MORENA, PAN y hasta el PRI.  

Seguramente la intención es dar la percepción de que tienen aceptación y que su partido o gran elector les elija, pero créalo, se engañan solos.  

Hasta parecen chiquitos, como si no supieran que quienes mandan en el partido también saben de encuestas hechas a modo, que por lo general quien las paga es el que sale mejor posicionado, además, aunque la encuesta fuera real, sin sesgo, y salieran bien evaluaos en resumidas cuentas las mismas no determinara si son candidatos o no.  

Es obvio que la decisión la dará el gran elector de cada partido y listo, ya se ha visto en otras elecciones que no se queda con la candidatura el que siempre aparecía bien ubicado en las encuestas sino el que le convenga más sus liderazgos partidistas.  

Por lo tanto, aunque gasten mucho en encuestas si no están realmente en el ánimo del dueño de la franquicia guinda, azul, o tricolor pues de nada les servirá.   

La sabiduría popular reza que a quien madruga DIOS le ayuda y seguramente en eso se basan muchos aspirantes a candidatos que pretenden ganarle tiempo al tiempo, aunque alguien les debe hacer saber que no se olviden del otro viejo y conocido refrán en el sentido de que no por mucho madrugar amanece más temprano.   

Dicen que en la guerra y el amor todo es válido, agregaríamos que en la política también, el problema es que la gente ya no cree en las encuestas, cierto es que las mismas pueden servir para generar opinión, pero igual es verdad que el respetable termina por rechazar a quienes los triunfos por adelantado se quieren adjudicar.   

Definitivamente las encuestas reales, bien hechas, son una fotografía del momento, incluso los sondeos de opinión son una herramienta para medir las preferencias y válidas, siempre y cuando se realicen con seriedad, responsabilidad, con una metodología científicamente comprobada, solo así arrojan un buen parámetro para visualizar donde se está parado, hacia donde tienen que caminar, y que se pretende lograr por quien las mande pagar.  

Igual hay que decir que hay de empresas a empresas en eso de encuestas de opinión, unas con mucha credibilidad y que no están dispuestas arriesgar su prestigio para manipular estudios, sobre todo aquellas que reciben financiamiento internacional y se utilizan para medir la estabilidad de nuestro país, y otras que nacieron de la noche a la mañana y se venden al mejor postor.  

Que el sentido de las encuestas se desvirtúe, previo a los tiempos electorales, solo daña a los políticos, que no falten los personajes que paguen documentos a modo para hacer ruido, también.   

Es muy probable que desde la CDMX ya esté definido el candidato de MORENA al gobierno de Tamaulipas, como debe estar definido el candidato azul desde el tercer piso de palacio de gobierno, o el del PRI desde donde más cariño les demuestren, por lo tanto, y con el tiempo lo veremos, las encuestas saldrán sobrando.  

Rosa Elena González

Es Licenciada en Relaciones Públicas. Ha colaborado con editoriales en El Mercurio.
Actualmente su columna Vida Diaria se publica en el Portal HOYTamaulipas y los periódicos La Verdad de Tamaulipas, Expreso, La Extra, La Voz de Tula, El Tiempo de Mante y Astronoticias, El Bravo de Matamoros y Canal 10