Tras el arrollador triunfo del Movimiento de Regeneración Nacional, el fatídico 6 de junio -para los panistas-, se organizó días después un cónclave para unir a las distintas fuerzas de Morena en la capital Ciudad Victoria, al final no se concretó.

Y es que la respuesta de los actores invitados era unánime: Tenemos miedo a un carreterazo.

Muchos de ellos temían que el trayecto a Ciudad Victoria por arte de magia les apareciera una orden de aprehensión obsequiada diligentemente por un juez a la Fiscalía General de Justicia del Estado.

A la fecha hay uno que otro con “cuentas pendientes” y otros más con procesos abiertos y seguramente uno que otro a quien se le analiza con lupa sus movimientos, no vaya a ser que la revolución ocupe sangre.

Y entre los suspirantes a abanderar a Morena rumbo a la gubernatura de Tamaulipas, ya es visible una averiguación en contra de Alejandro Rojas Diaz Durán, quien este lunes me dijo en corto que no le quita el sueño y que en dado caso que lo vinculen a proceso podría defenderse “de esa injusticia”.

A estas alturas del partido -insisto- seguramente el aparato estatal está revisando a cada uno de los actores que no comulgan con sus ideales y que serían un estorbo para la sucesión gubernamental, digo, si ya les quitaron el Congreso y las principales alcaldías… sería un exceso que también tengan que perder la gubernatura.

Y precisamente, me preguntaba ¿Qué le podrían encontrar al senador Américo Villarreal Anaya?

Digo, si bien hoy defeca santidad luego de ser absuelto con el manto protector de San Peje, digo, del señor presidente Andrés Manuel López Obrador, no hay que olvidar que tiene un “pasado oscuro”, al haber participado en administraciones “corruptas, desalmadas e ingratamente” priístas.

No vaya a ser que en estos próximos días, mientras el termómetro electoral sube unos cuantos grados, amanecemos con la novedad que desde cualquier fiscalía, ya sea la General o la Anticorrupción, haya un proceso abierto en contra del beatificado senador de la República.

¡Tela hay de dónde cortar!

Del 2006 al 2010 fue subsecretario de Calidad y Atención Médica Hospitalaria de la Secretaría de Salud.

Luego, del 2011 al 2016 encabezó la más fifí de las fifís subsecretarías en el “gobierno” de Egidio Torre Cantú, nada menos era el titular de Calidad y Atención Médica Especializada, allí esa misma dependencia.

Solo bastaría echarle una ligera miradita a cualquier cosa mal puesta o que haya movido de lugar, para dar elementos y presentarlo como un corrupto más a quien le debe caer y sin misericordia el peso de la ley.

Por eso pregunto…

Si investigaran a Américo Villarreal Anaya ¿Cuántos muertos le encontrarían en el armario?

El tiempo lo dirá…

ESTO SE DICE

En los círculos morenistas y panistas consideran al senador Américo Villarreal como el rival más débil y hasta el más manejable. Aseguran que de ser el candidato de Morena a la gubernatura sería lo mejor que le pasara al PAN.

El problema, que así como están las cosas, no se pueden dar el lujo de entregarle la campaña en bandeja de plata.

El problema que hay ahorita, es que si Morena pone un burro de candidato (que me perdone el burro), en un descuido ganaría con la mano en la cintura.

Comentarios: Twitter @Marco_Esquivel

Marco Esquivel

Valle Hermoso, Tamaulipas 1973
Periodista, Agente de Seguros y Consultor Político

Tiene una maestría en Gobierno y Política Pública; un Máster en Gestión de Riesgos por la Ealde Business School.
En 2015 concluyó un Máster en Asesoramiento de Imagen y Consultoría Política por la Universidad Camilo José Cela (Madrid, España)
Es director general del periódico digital HOYTamaulipas.
Su columna Esto se Dice se ha publicado en distintos medios de comunicación de Tamaulipas.

Como agente de Seguros, cuenta con cédula A, B y D, para intermediar seguros personales, empresariales y agrícola y ganado. Es miembro de la Million Dollar Round Table que congrega a los mejores agentes de seguros internacionalmente. Durante el 2024 terminó su certificación en seguros de vida en The American College of Financial Services.