Tampico, Tamaulipas. - Con 17 años de trayectoria musical, la joven violinista Eréndira Ramírez, aseguró que es necesario que la música y los sones de Tamaulipas sean preservados, difundidos y reconocidos, además se ser llevados como parte de la educación desde el nivel básico.

Originaria de González, donde creció observando al Cerro del Bernal, dijo que su familia es la primera y la única que le dedica tiempo a tocar y cantar huapangos; aunque el amor a esta música nació gracias a sus padres quienes la llevaron a un festival.

La también estudiante de Geociencias en el Instituto Tecnológico de Ciudad Madero, reconoció que la pandemia por el Coronavirus ha sido complicada para los músicos, quienes buscan acoplarse cada día para cumplir con las medidas preventivas y sanitarias.

"Preservar el huapango porque es algo que nos han dejado grandes músicos y sería triste olvidarlos, recordar siempre los huapangos, no dejar que la tradición se quede en el olvido, que no se pierda la tradición huasteca", expresó la artista.

Manifestó que las clases para sones solo se llega a dar en escuelas rurales, pese a que, en ciudades como Victoria, Tampico y Madero, hay muchas personas que les encanta el huapango.

La alumna de Mauricio Márquez Trejo, recalcó que ha hecho falta impulso al huapango huasteco en las escuelas, pese a que es algo cultura y que forma parte del folclor de Tamaulipas, por lo que actualmente se encuentra en proyectos de crear contenido audiovisual junto a otros artistas como lo son Cecilia Boeta y Karina Reyes, con quienes forman un trío para entonar los sones.

Hay que señalar que una gran parte de Tamaulipas forma parte de la región huasteca, donde se utiliza la cuera y vestidos camperos, colinda con regiones como Veracruz, San Luis e Hidalgo, donde existen campeonatos de huapango.