Nuevo Laredo, Tamaulipas. - Hoy hace justo un mes, Ricardo Valdés y su compañero de trabajo Jorge Arévalo, desaparecieron en la carretera Monterrey-Nuevo Laredo, y hasta el momento no se sabe nada de ellos, pese a la búsqueda insaciable de sus familiares.

La señora Yolanda, madre de Ricardo, reconoció que ya no puede, que no tiene fuerzas, mientras relata la historia en un programa de radio, no puede evitar llorar ante la desesperación y tristeza que le genera no saber nada de su hijo.

"Son muchos, yo ya no puedo, se me acaban las fuerzas, pero sigo de pie para encontrar a mi hijo, que me lo devuelvan, no sabemos nada más", relató.

Manifestó que los dos jóvenes salieron desde Monterrey para realizar trabajos en Nuevo Laredo, dedicándose al mantenimiento de climas industriales en la empresa Profuturo.

Los trabajadores salieron la mañana del 25 de mayo y lograron llegar a Nuevo Laredo, siendo en esa ciudad tamaulipeca donde se tiene la última ubicación, sin embargo, no hay nada, ni pistas de su paradero.

Familiares de desaparecidos aseguran que van 73 tan sólo en lo que va del 2021, solo en ese tramo carretero de Monterrey-Nuevo Laredo, mientras que la Comisión de Búsqueda de Tamaulipas cuenta con al menos 50 reportes.

El último reporte que se tiene desde Tamaulipas es de una familia estadounidense, integrada por Gladys Cristina Pérez Sánchez, de 39 años; Juan Carlos de 16, y Michelle Cristina, de nueve años.

La madre y los dos menores viajaban en un automóvil Chevrolet Sonic modelo 2014 de color amarillo, con placas de circulación NBX 4740 del Estado de Texas.

Una fuente de la Comisión de Búsqueda de Tamaulipas relató que en los operativos para localizar a las personas desaparecidas, sólo hay indicios de un lugar donde han tenido a la gente, y fueron encontradas carteras, credenciales, teléfonos y cinta metálica con la que se presume amarran a la gente.