Mientras desarrollaba el contenido de algunos subtítulos de los 7 títulos que van hasta el momento como parte de “Mi libro de memorias”, se me venían a la mente recuerdos -casi frescos-, de ciertos episodios de mi vida que a lo largo y ancho de mis 47, me han permitido ser como soy.

Cada capítulo contiene por lo menos cinco subtítulos.

Lo que me parece importante es que basándome en el esquema, lo único que tengo que hacer cuando me siento a escribir mis memorias, es abrir el archivo, revisar el subtítulo donde me quedé, enseguida comienzo a escribir.

Esa manera de organizar los subtítulos se me hace divertida ya  que durante el proceso de recreación voy recordando los episodios como si hubieran sucedido el día de ayer, de esta forma no me siento a escribir pensando en qué voy a escribir, sino qué subtítulo sigue para desarrollar ahora.

Uno de los propósitos que persigo con este ejercicio, es aprender a escribir correctamente, echando mano de la gramática, ortografía y redacción.

Con respecto a estos temas, me he dado a la tarea de estar investigando algunas palabras de las cuales he tenido mis dudas sobre su ortografía.

Me considero afortunado en este sentido por la posibilidad que tengo ahora de investigar tranquilamente desde casa, pues desde hace un par de meses tengo acceso al servicio de lectura Kindle Unlimited, de Amazon, desde entonces disfruto la gran oportunidad de leer todos los e-book (libros electrónicos) que me sean posibles.

El día de ayer, por cierto, compré dos e-book: “LOS 101 ERRORES MÁS COMUNES DEL ESPAÑOL”, de Sandro Cohen; “ES MI TIPO” (Un libro sobre fuentes tipográficas), de Simón Garfield.

Mi colección de e-book ahí va; la colección de e-book “Muestras gratis”, me parece interesante debido a que de esta última colección voy seleccionando los e-book que posteriormente tendré que comprar porque la información que vienen en el contenido me es útil para las investigaciones, aparte, para ir perfeccionando el trabajo que estoy realizando con los ejercicios sobre edición de libros.

Estas lecturas me han servido de mucho para darme una idea de cómo estructurar el libro de memorias, ya que no quiero detenerme en el contenido precisamente, sino ver la composición de los títulos y subtítulos, los párrafos, el tamaño de letra, el tipo de letra tanto del cuerpo del texto como el tipo de letra que usaré para la portada del libro.

Por ese motivo compré el e-book del autor Simón Garfield, porque tiene una facilidad impresionante de narrar o explicar las historias sobre tipografía de las cuales estoy aprendiendo; por cierto, me quedé en la historia: “Un alto en la fuente Gill Sans”.

El libro de memorias también va a contener un capítulo sobre dedicatorias a mis amigos, a mis maestros, a mi familia.

No dudo en lo más mínimo que el libro que he comenzado tendrá un final feliz, no tanto por lo que diga en las historias, sino porque los conocimientos que estoy adquiriendo por medio de los e-book, se verán reflejados en la composición del libro, de eso no debe caber la menor duda.

Ricardo Hernández Hernández
Poeta y columnista

Colaborador del portal:” Hoy Tamaulipas” hasta la fecha.
Actualmente estoy cursando un “Diplomado en Creación literaria” en la Biblioteca del Centro Cultural Tamaulipas, con el maestro José Luis Velarde.