Estoy por comenzar a escribir un libro el cual va a tratar sobre mi vida, para ello me estoy dando a la tarea de leer sobre diseño editorial, voy empezando a descubrir el mundo de la edición, composición y maquetación.

¿Qué es lo que me ha llevado a emprender esta parte tan importante para la presentación de un libro?

Podría decir: la necesidad de ver mis trabajos impresos.

Cuando se me ocurrió la idea de mandar a editar el primer libro le pensé un poco, ya que mandar a maquetar y diseñar el trabajo era muy caro, para mí. Después del tercer libro pensé en que si me ponía a estudiar cómo se maquetaba un libro, ya sólo me haría falta el diseño de la portada y contraportada, porque todo lo demás ya lo podía hacer solo.

Me sentí animado para descubrir por cuenta propia cómo podía usar la aplicación para dibujo Paint 3D para diseñar mis portadas. En este caso, lo más importante para el título era usar alguna de las fuentes que ya tenía preestablecidas en mi computadora, por eso usé los tipos Times New Roman, la Arial, así como la Kristen ITC.

Para el cuerpo del texto usé la Times New Roman, la Book Antiqua, así como la Palatino Linotype.

Por otro lado, con respecto a los párrafos, he usado el párrafo moderno (párrafo sin sangría); para el presente trabajo tengo pensado usar el párrafo normal u ordinario (donde la primera línea del bloque se sangra).  

Voy a volver a darle una repasada a los apuntes de Roberto Zavala Ruiz, porque pienso tomar como modelo su obra “El libro y sus orillas”, el cual, por cierto, lo tengo en libro electrónico (E-book).

A través de ese libro el cual he estado leyendo con calma, sin prisas, me he podido dar cuenta que los títulos van en mayúscula y no están en negrillas; los primeros párrafos de cada título no llevan sangría, sólo a partir del segundo; se usa la letra cursiva en ciertos casos, también se emplea la versalita (la cual por razones que desconozco no la he podido usar en mi computadora).

Con respecto al tipo de letra que se usa en este libro no me atrevo a decir cuál es, ya que no tengo el suficiente conocimiento como para identificarla, pero la fuente se puede leer muy clara. No estaría mal que las editoriales pusieran el nombre del tipo de letra que se usa en cada obra, sería una información de mucha importancia para los que nos dedicamos a emprender trabajos de textos.

Otro detalle que me llamó la atención es que los subtítulos van en un tamaño de letra menor que la del resto del cuerpo. Quiero suponer que si la letra del texto está en un tamaño 12 -es una suposición mía, aclaro-, el subtítulo podría estar en un tamaño 8. Lo cierto es que el subtítulo  llama la atención, aparte que va en minúscula y creo que en cursiva.

Hay que repasar bien todos esos detalles, porque a la primera leída sólo nos queda la idea, en el segundo repaso se aclara, ya en la práctica se perfecciona la enseñanza. Observar cada detalle de la composición de un libro nos ayuda al aprendizaje.

Ricardo Hernández Hernández
Poeta y columnista

Colaborador del portal:” Hoy Tamaulipas” hasta la fecha.
Actualmente estoy cursando un “Diplomado en Creación literaria” en la Biblioteca del Centro Cultural Tamaulipas, con el maestro José Luis Velarde.